Bastan unas cuantas gotas de lluvia y a veces ni siquiera eso, para que empiecen los apagones de la CFE por toda la ciudad.
Las causas de esos apagones van desde la falta de mantenimiento oportuno de las líneas de energía eléctrica ante los problemas de dinero que padece la CFE desde hace años, hasta la sobrecarga del servicio, dado el gran número de usuarios nuevos que viven en las torres de departamentos que saturan la ciudad.
Lo importante para el mundo del derecho es saber que si esos apagones generan daños materiales, se puede demandar a la CFE para que los repare.
Por ejemplo, es muy común que, después de esos apagones, al regresar la energía eléctrica, se sobrecarguen algunos aparatos electrodomésticos y se descompongan.
Demandar a la CFE para que pague el costo de la reparación o reposición de los aparatos electrodomésticos descompuestos en juicios individuales no es lo más efectivo.
Esto porque en la mayoría de los casos saldría más caro contratar a un abogado que la condena que recibiría la CFE.
Pero si se aprovecha la figura de las acciones colectivas, la cosa cambia, basta que se reúnan 30 o más personas afectadas por los apagones para que puedan iniciar una acción colectiva en su favor y en favor además de todos los que se encuentren en la misma situación, aunque no hayan firmado la demanda ni hayan participado en el juicio.
Para iniciar la acción colectiva que les comento, se necesita, además de reunir al menos a 30 afectados, que estos demuestren ser usuarios del servicio de energía eléctrica que presta la CFE y tener la factura o comprobante del gasto que hicieron para reparar o reponer los electrodomésticos descompuestos con una opinión técnica que diga que el daño se causó por la sobrecarga de energía eléctrica que sobrevino después del apagón.
Si usted está interesado en iniciar una acción colectiva contra la CFE por daños causados a raíz de los apagones, póngase en contacto conmigo a mi correo electrónico y, si se reúnen al menos 30 personas, con todo gusto los defendemos sin costo alguno.