Después de que el Ayuntamiento perdiera dos acciones colectivas nuestras presentadas por la contaminación que genera el basurero municipal, raudo y veloz el Químico olfatea un gran negocio y ya se dio su vuelta a EU para cerrar el trato.
A consecuencia de las dos acciones colectivas, el Ayuntamiento ha sido multado con más o menos $ 30 millones de pesos y contando.
Lo anterior porque en materia de derecho ambiental, hay un principio general que dice que “el que contamina paga”.
Como el ayuntamiento ha contaminó y sigue contaminando el medio ambiente con la operación del basurero municipal, tendrá que pagar por esa contaminación.
La contaminación no se genera por el servicio de recolección de basura, sino porque no se dispone de esta como debe ser.
Es por eso por lo que, en los planes del Alcalde no está concesionar el servicio de recolección de basura y tampoco concesionar su tratamiento final.
Lo que quiere hacer es celebrar un contrato con una empresa de EU para que esta le de tratamiento adecuado a la basura. Es decir, quiere separar la recolección de basura de su tratamiento final.
Y obviamente que al celebrar el contrato quien ande muy apresurado correteándolo, es porque quiere llevarse su comisión.
Está muy bien que se trate la basura adecuadamente y que termine la contaminación ambiental que fue denunciada en las dos acciones colectivas.
Lo que no está bien es que aprovechen la oportunidad para hacer un negocio.
Si el contrato se celebra, debe contener condiciones muy favorables para el ayuntamiento, para los trabajadores de aseo y limpia y, sobre todo, para el medio ambiente.
Si el contrato beneficia solo a la empresa que se lo lleve, es simplemente porque alguien en el Ayuntamiento estará haciendo un negocio millonario otra vez a costillas de los bienes públicos.
Se lleve a cabo o no el contrato, es urgente que la contaminación ambiental termine lo más pronto posible ya que, además de sufrir el medio ambiente y como quedó destacado en una de las dos acciones colectivas, la contaminación ha afectado la salud de quienes viven alrededor del basurero municipal y hay que protegerlos.
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