"Sarcasmos"
“No podemos salir tan seguido”. “¿Por qué? ¿Crees que vamos demasiado rápido?” “No, es que sólo tengo cuatro camisas”. / El capitalismo es el reino de la codicia; el socialismo es el reino de la envidia.
Brexit
Me dice un queridolector: “La votación en Gran Bretaña, respecto a dejar la Unión Europea o permanecer en ella, no determina lo que hará el Gobierno. Éste puede hacer lo que le pegue la gana - por ejemplo, declarar que la votación no dejó claro qué se debe hacer, y que deberá haber nueva votación. O puede de plano ignorar la votación si no le conviene, como sería el caso si la votación es a favor de dejar la UE. Así que todo el borlote sale sobrando. El Gobierno de GB es pro-permanecer, y es lo que muy probablemente seguirá siendo el caso, le guste o no a la población.”
El derecho a la vida
Sobre este candente y pasional debate, dos opiniones masculinas: “Un zigoto no es un bebé. Un aborto no es un asesinato. Toda discusión al respecto parte de la ignorancia. No hay una definición científica de ‘vida’. Tiene más genes un recorte de una uña que un zigoto. Tus amigos hablaron desde la ignorancia”. Otro: “¿Y qué hay del derecho del hombre a no mantener un hijo indeseado? Si la mujer no quiere al hijo, aborta. Si el hombre no lo quiere, tiene, por ley, que mantenerlo. Eso no es parejo. Acaso cuando los hombres comencemos a exigir nuestro ‘derecho a la paternidad voluntaria’, y a no reconocer ni mantener un hijo no deseado, se comenzaría a ver lo inhumano de la posición femenina pro-aborto”. Enseguida, tres opiniones femeninas. Primera: “Muy fácil generalizar. Difícil decidir”. Otra: “Estoy de acuerdo con la última mujer (que admite el aborto en ciertos casos)”. Otra: “La vida es sagrada. Todas las personas que vivimos en este planeta venimos a pagar karma, nunca lo olvides, es importantísimo estar en este planeta porque así cumplimos con un compromiso con nosotros mismos, avanzar en el aspecto espiritual es lo único que debe importarnos. Si a un ser le quitas esa oportunidad le es difícil volver a encarnar y así luchar por elevarse un poco. Eso es lo único que debe importarnos. Yo tuve la suerte de tener como maestro a un sacerdote jesuita, psiquiatra excelente. Él nos platicaba que era producto de una violación. Su madre, aunque tuvo la oportunidad de abortar, no lo hizo. Así que en ese aspecto no hay reglas. Solo eso te digo: la vida hay que respetarla siempre”.
Karma tramposo
Esto del karma, creo yo, es un argumento sinuoso (como tantos otros de índole religiosa) y se presta a cualquier clase de malabarismos morales. Digamos, por ejemplo, que esa alma (encarnada en un niño no deseado) trae un karma especialmente pesado, que la condena a ser abortada una y otra vez y en consecuencia no poder ni siquiera comenzar a pagar con sufrimientos y penurias vitales su deuda cósmica, proceso fatal que los abortos decretados pospondrán una y otra vez (también todo este asunto de la deuda que hay que pagar por no sé qué culpas cometidas en nadie sabe cuál dimensión por no se sabe quién no se sabe cuándo, me parece muy discutible, pero esa es otra cuestión). Los abortistas (mamá, papá, médico, etc) serían una especie de ángeles benefactores que en un sentido contrario ayudarían a esa alma enkarmada a cumplir su triste destino. Es como en la teoría (Borges: Tres versiones de Judas, 1944) de que Judas fue tan extraordinariamente bueno y amaba tanto a Jesucristo, que fue el único de los apóstoles que se prestó a jugar el necesario y nefasto papel del traidor que lo entrega a la sevicia romana, pasando así al catálogo de los mayores infames de la historia. Pero como el asunto claramente me rebasa por muuuuuucho, mejor me declaro incompetente y me escurro.
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