Melissa Sánchez
Crónica de una erosión política
Cual partido de futbol, el Gobernador Jesús Aguilar Padilla espera que el "árbitro" pite el final del encuentro de su Gobierno, aunque no vería mal que se adelantara la conclusión de su mandato para ya terminar de una buena vez con la administración de Gobierno que encabeza, para retirarse a descansar.
Aguilar Padilla presentó ayer su último informe de Gobierno, sin duda muy diferente a todos los demás, principalmente por el tono y actitud de enfado y hartazgo que evidenció ante los medios durante una conferencia de prensa en la que más que responder a la sociedad con resultados, lo que transmitió es su indiferencia por responder lo que sea y a como sea, sin importar ya las consecuencias mediáticas que ello provoque.
"Dejo un estado en paz", "hay estados mucho más peor que el nuestro", "me atengo al juicio popular", entre otras frases pronunció el Gobernador con cierta dejadez cuando le cuestionaban el fracaso en materia de seguridad, su mala evaluación ciudadana, su mala imagen ante la sociedad y el desgaste político tras la derrota en las elecciones locales que derivaron en la alternancia de Gobierno.
La actitud de Aguilar al cierre de su sexenio habla de una erosión política de su figura, del hartazgo y del agotamiento de administrar un Estado que se le fue de las manos y que una mitad de él no pudo tenerlo bajo control.
Nieto de tigre... ¿pintito?
Apenas con unos meses de edad, el nieto de Jesús Aguilar Padilla ya demostró que tiene buena "madera" para ser diputado local.
El mismo Gobernador compartió el punto de vista del legislador panista Alejandro Higuera, quien fue el primero en "descubrir" que el descendiente del Gobernador seguramente seguirá sus pasos en la política: será diputado.
Y es que el niño fue llevado por sus abuelos a entregar el Sexto Informe, pero al llegar al recinto parlamentario el nieto de Aguilar se echó a dormir y roncar, emulando a varios diputados que a veces se echan su siestecita durante la sesiones.
Pobreza extrema
"En Sinaloa no hay pobreza extrema", afirmó entre triunfal y presumido Jesús Aguilar Padilla como parte de su Sexto Informe de Gobierno.
Quién sabe si por orgullo o por no reconocer su ineficiencia, los políticos muchísimas veces expresan medias verdades ofreciéndolas por verdades absolutas, como si por obra y magia del discurso sus palabras reflejaran fiel y honestamente la realidad.
Algún buen samaritano debe darse a la tarea de buscar a los sinaloenses que viven en la pobreza extrema y, después de tocarles el hombro con el dedo índice para llamar su atención, decirles que el Gobernador decretó que no hay pobres extremos en la entidad, así automáticamente ellos ya no están en la miseria.
También la Secretaría de Desarrollo Social y Sustentable debe revisar sus indicadores, pues en 2008 publicó datos de que el 19 por ciento de los sinaloenses se encontraba en situación de pobreza alimentaria, 28 en carencia de capacidades y el 49 por ciento de patrimonio.
Además, la Sedesol deben enmendar la afirmación que hizo en octubre de 2009 el Coordinador estatal del programa de Desarrollo Humano Oportunidades, Cruz Eduardo Angulo Castro, quien en ese entonces dijo que 630 mil de los 2 millones 608 mil 442 habitantes de Sinaloa enfrentaba problemas para alimentarse y asistir a la escuela, es decir, sufrían pobreza alimentaria y de capacidades.
Y otro dato que desmiente la desafortunada frase del Gobernador es la información que proporcionó en enero de este año Arturo Torres Santillán, Director Operativo del Banco de Alimentos de Culiacán:
"En Sinaloa cerca de 470 mil personas están en pobreza extrema o pobreza alimentaria, y cubrimos cerca de 50 mil (el banco y los gobiernos), y todavía queda mucho camino por recorrer".
Mientras son peras o son perones, lo cierto e irrefutable es que en Sinaloa existe pobreza política extrema.
No se inventa la realidad
En donde sí se aventó un 10 el Gobernador fue en reconocer que no se puede inventar la realidad.
Contrario a años anteriores en los que defendía a capa y espada que no íbamos tan mal en seguridad, y que si la gente se expresaba mal de ese renglón era simple percepción, pero no la realidad, ahora sí cambió Aguilar Padilla su discurso. Aceptó que no era percepción, sino una realidad el aumento de homicidios dolosos, y la realidad, añadió, no se puede inventar.
Los fieles de la balanza
Mientras tanto, el Gobernador electo, Mario López Valdez, se reunió ayer con los diputados electos y el dirigente estatal del Partido Nueva Alianza, Manuel Cárdenas Fonseca; Alfredo Vizcarra Díaz; Rosa Elvira Ceballos y Crescenciano Espericueta Rodríguez, respectivamente.
De acuerdo con la información que nos hicieron llegar, Malova manifestó que la educación básica será fundamental en su nuevo gobierno y que buscará redireccionar el gasto para agregar un valor al capital humano que tiene Sinaloa.
Por cierto, el dirigente del Panal se deslindó de la alianza que formó con el PRI y PVEM para la elección gubernamental, y destacó que formarán su propia fracción parlamentaria buscando acuerdos con el Poder Ejecutivo.
Los diputados de Nueva Alianza se perfilan como los fieles de la balanza en la próxima legislatura, pues bien podrían en algunos casos apoyar las iniciativas de Malova y la oposición, y en otros, las del PRI.
Malecón es columna institucional de esta casa editorial
maleconcul@noroeste.com