Iniciamos ayer la semana con una jornada mixta en las principales bolsas de valores del mundo. Los índices estadounidenses cerraron con ligeras pérdidas respecto al viernes, incorporando la mayor inflación y a la espera de nuevas señales de política monetaria. La caída abonó al tono negativo de la semana pasada, cuando el avance de los precios al consumidor y al productor superó las expectativas y materializó los temores de aceleración de inflación.
Ayer, sin nuevos datos económicos, los inversionistas continuaron a la espera de señales de política monetaria, para saber si habrá intervención para frenar la subida de precios pese a que eso podría frenar el ritmo de recuperación. Por otro lado, los gobiernos de Estados Unidos y de la Unión Europea dijeron que trabajan en conjunto para superar las diferencias comerciales que tienen y que llevaron a la imposición de aranceles recíprocos durante la administración del ex Presidente Trump.
En México, las bolsas corrigieron al alza su desempeño, pese a la ausencia de catalizadores de corto plazo, en medio de preocupaciones estadounidenses por la inflación y búsqueda de validación de la recuperación. Los dos principales indicadores bursátiles hilaron tres sesiones de alza y marcaron su tercer mejor nivel de los últimos 31 meses.
Aunque la inflación no había, hasta antes de la semana pasada, desatado las ventas en las bolsas de México, ahora los inversionistas esperan nuevas señales de política monetaria que, en caso de cambiar de visión, podría adelantar el retiro de los estímulos y afectar el ritmo del rebote económico. Morgan Stanley se unió a la lista de expertos que confía más en la recuperación de la economía mexicana, aunque también llamó la atención sobre la débil inversión.
En temas energéticos, observamos que los precios del petróleo alcanzaron ayer su mayor nivel en dos años, ya que los inversionistas mejoraron sus expectativas sobre el aumento de la demanda ante la menor restricción de movilidad en Europa. Así, el precio del barril de petróleo estadounidense, West Texas Intermediate, ganó 90 centavos para colocarse en 66.27 dólares, nivel más alto en los últimos dos años, mientras que el crudo europeo, Brent del Mar del Norte, aumentó 75 centavos para escalar hasta los 69.46 dólares el barril, nivel no visto en dos meses.
Analistas del mercado han dicho que los petroprecios se han beneficiado del debilitamiento del dólar y de la expectativa de una mayor demanda ante el proceso de vacunación en Estados Unidos y en Europa. Por ejemplo, con la aceleración de los programas de vacunación en Europa, tanto Francia y España han aliviado las restricciones relacionadas con covid-19 en las últimas semanas, mientras que Portugal y los Países Bajos suavizaron las restricciones de viaje de los sábados a medida que se acercaba la temporada de vacaciones de verano.
De hecho, la economía británica reabrió este lunes, dando a 65 millones de personas algo de libertar de tránsito después de un bloqueo de cuatro meses. En suma, con la temporada de vacaciones encima, se espera una mayor demanda por gasolina y combustible para aviones. La mejora de la demanda en varias partes del mundo, ayudó a eclipsar datos económicos decepcionantes de China. Las fábricas de China desaceleraron el crecimiento de su producción en abril y las ventas minoristas no cumplieron con las expectativas cuando los funcionarios advirtieron de nuevos problemas que afectan la recuperación en la segunda economía más grande del mundo.
Sin embargo, algunos expertos aun consideran que preocupaciones sobre la propagación de la variante del coronavirus detectada por primera vez en India podrían generar cautela en el mercado. De hecho, las ventas nacionales de gasolina y diésel de las refinerías estatales de India se desplomaron en una quinta parte en la primera quincena de mayo respecto al mes anterior.
En asuntos cambiarios, tenemos que el peso mexicano se fortaleció por tercera jornada consecutiva, ya que se han ido desvaneciendo los temores sobre que el repunte de la inflación provoque medida monetaria menos laxa en Estados Unidos. De acuerdo a los reportes de Banco de México, el tipo de cambio interbancario cerró ayer en 19.79 pesos por dólar, un avance de más de seis centavos respecto al viernes previo y el más bajo desde el 21 de enero de este año.
El índice dólar o DXY, que mide al dólar frente a seis rivales, se debilitó luego que varios funcionarios de la Reserva Federal han reforzado la idea de que permitirán alta inflación hasta conseguir que el pleno empleo se recupere, dado que el aumento de los precios solo será momentáneo y transitorio. Finalmente, destacaron las notas sobre la actividad industrial de China, que reportó un crecimiento anual de 9.8 por ciento en abril, impulsado por las exportaciones y la recuperación de otros países, así como la de la calificadora Fitch Ratings, que ratificó la opinión crediticia en BBB- con sesgo estable para México. Sigamos atentos; nos vemos el próximo martes.
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