"La LMP suma cinco años sin poder coronarse en la Serie del Caribe"

Desde la Serie del Caribe 2016, que tuvo como sede Santo Domingo, los representantes de la Liga Mexicana del Pacífico no han podido volver al trono del torneo.

En aquella ocasión, en el Estadio Quisqueya Juan Marichal, Venados de Mazatlán, con Juan José Pacho al frente, logró lo que ningún equipo mexicano había hecho: ganar el torneo con marca invicta.

Venados terminó con récord de 6-0 y en la Final se impuso a Tigres de Aragua, de Venezuela, con lo que el equipo del puerto alcanzó su segunda corona, para unir su nombre al de Naranjeros de Hermosillo, Tomateros de Culiacán y Yaquis de Ciudad Obregón con la misma cantidad de trofeos.

Esa corona fue para México su cuarta en seis años, siendo Yaquis de Ciudad Obregón, en dos ocasiones, Naranjeros de Hermosillo y los porteños quienes treparon a lo más alto.

Venados de Mazatlán fueron los últimos campeones en una Serie del Caribe al coronarse en 2016.

Desde entonces, el camino en la llamada “Serie Mundial Latina” para la Liga Mexicana del Pacífico ha sido de muchos altibajos, ya que suman cinco ediciones sin poder subir a lo más alto del podio.

Al año siguiente de la coronación de Venados, Águilas de Mexicali fue quien buscó la gloria en el Estadio de Tomateros de Culiacán y estuvieron muy cerca de lograrlo, pero cayeron en el juego decisivo por 1-0 ante Criollos de Caguas, de Puerto Rico.

En esa ocasión, los cachanillas terminaron con récord de 4-2, tras una primera ronda donde acumularon marca de 3-1.

Para 2018, el Estadio de Charros de Jalisco fue el escenario, dándole a México la sede por segundo año en fila debido a problemas en Venezuela, que era la sede original.

Ahí estuvo Tomateros de Culiacán, en la segunda aventura del mánager Benjamín Gil en estos terrenos, y poco pudieron hacer, ya que quedaron en el “round robin” tras tener registro de 1-3.

En 2019, la Confederación de Beisbol Profesional del Caribe volvió a presentar problemas para definir la sede, la cual le tocaba nuevamente a Venezuela, pero al mantenerse los problemas de ese país, la responsabilidad recayó en Panamá y su Estadio Rod Carew, lo que además, trajo consigo la inclusión, vía invitación, de un equipo panameño.

Tras el último título de la LMP en Series del Caribe, Águilas de Mexicali es quien más cerca ha estado de la corona, al ser subcampeones en 2017.

Y fueron los inesperados anfitriones quienes darían la sorpresa al llevarse todos los honores.

En esa ocasión, Charros de Jalisco llevó la representación de la Mexicana del Pacífico y quedó en segundo lugar dentro del Grupo A con récord de 2-2 para concluir sin poder jugar la Final y con el cuarto lugar del torneo.

Para 2020, Tomateros regreso a la competencia internacional, en donde Benjamín Gil tendría su tercera oportunidad para buscar el título que le hace falta como mánager en la pelota invernal, pero nuevamente se quedaría en el camino en semifinales por un marcador de 1-0 ante Cardenales de Lara, de Venezuela.

Y finalmente, nuevamente con los guindas del apodado “El Matador” volvieron a repetir en el escenario caribeño y otra vez la suerte no estuvo de su lado, al caer, por segunda vez en fila en la antesala de la Final, ahora ante los Criollos de Caguas.

Ya con Santo Domingo, República Dominicana confirmada como sede del torneo, la Liga Mexicana del Pacífico buscará acabar con la sequía de títulos y regresarle la etiqueta de potencia de la zona a México.