"Daniel Larios y Carlos Loaiza, de grafiteros a artistas"

MAZATLÁN._ Eran las 16:00 horas, los de la clica SER, de la colonia Olímpica, correteaban a un adolescente, Daniel Larios, que corría despavorido por la orilla del Arroyo Jabalíes, a la altura de la colonia Jacarandas. No sabía en qué iba a terminar esa tarde, temía una golpiza, cruzó corriendo el puente y a lo lejos vio a un grupo de muchachos.
Ellos eran los de la clica SNA. Llegó a la esquina sin aire, saludó a Carlos Loaiza, el grafitero que le había dado fama a esa clica con los espectaculares dibujos de sus grafitis. A esa pandilla pertenecían más de 100 muchachos de los alrededores de la colonia Jacarandas. Cuando los atacantes vieron a la otra pandilla desistieron de la persecución.
Así nació una gran amistad, desde ese momento Daniel Larios y Carlos Loaiza empezaron a hacer juntos los grafitis de la clica a la que pertenecían, se acostumbraron a trabajar hombro con hombro, porque pintar grafitis es un delito y entre los dos podían acabarlos más rápido, antes de que llegara la policía.
Para estos dos jóvenes no es nada nuevo crear obras en mancuerna, durante más de siete años lo hicieron así, uno dibujaba mientras el otro ponía el color y viceversa, hasta que las experiencias y la madurez los hicieron desistir de pintar clandestinamente. Ellos siguieron pintando, uno en una escuela de arquitectura y el otro en una de diseño gráfico.
Corrían los primeros días del nuevo milenio y en las colonias de Mazatlán los jóvenes sin oportunidades, los que no tenían dinero para ir a los antros de la Zona Dorada y el Centro Histórico, organizaban su diversión en las esquinas de sus barrios.
Ahí bailaban break dance, pintaban grafiti, mezclaban música, hacían piruetas en patinetas y bicicletas, se organizaban para ir a las fiestas y se peleaban con otras pandillas. Las clicas estaban constituidas por hombres y mujeres.
"Aprendimos a pintar grafitis viendo a otros y revisando revistas, nosotros nos conocimos cuando teníamos 12 y 13 años, y los dibujos que hacíamos les gustaban a mucha gente", comenta Daniel.

Una clica por colonia
Carlos recuerda que en esa época cada una de las más de 80 colonias de Mazatlán tenían por lo menos una clica, y algunas llegaban a tener más de 100 integrantes. Se juntaban en las esquinas para hacer grafiti, escuchar hip-hop o andar y hacer piruetas en patineta y en bicicletas.
"En ese tiempo las clicas que tenían los mejores grafitis eran las más famosas. Con dos o tres que pintaran y que fueran muy buenos era suficiente para ser reconocidos. Los que nada más ponen letras necesitan muchísimas pintas para obtener cierto reconocimiento entre los jóvenes", comenta.
El ambiente de la cultura hip-hop que se desarrolló durante los años 90 y principios del Siglo 21, en el que fueron protagonistas Daniel y Carlos, ya no es tan popular en Mazatlán.
"Con Internet los chavos se conectan y hacen sus grupos por la red. En Guadalajara y Monterrey todavía los chavos están tirando grafiti artístico, en Mazatlán ya no se ve tanto. Todavía existen clicas, pero lo que hay más son los emos, metaleros, punketos y darketos, entre otros".

Ya no pintan en paredes
Cuando Daniel y Carlos tenían 18 y 19 años, respectivamente, dejaron de pintar paredes, después de cinco años de hacerse populares en los barrios por sus dibujos.
Ahora vuelven a reunirse para armar la exposición Crisarth, que se inaugurará el sábado a las 18:00 horas en la iglesia La Misión, ubicada en Batallón del Paredón 2010, en la Colonia Francisco Villa.
"Va a ser un encuentro de la gente que le gusta la cultura hip-hop. Daniel y yo somos prácticamente hermanos, hemos vivido muchas cosas juntos, a veces él traía sus bocetos y sobre eso trabajamos, yo los enriquecía con mis propuestas y lo mismo pasaba cuando le proponía mis cosas, por eso no se nos hace difícil hacer una misma obra juntos, siempre nos adaptamos a las ideas del otro", comenta Carlos.
Daniel hace un paralelismo con el oficio de la construcción.
"Es como si fuéramos albañiles, una pared la pueden hacer varios. Uno pone el color, otro sugiere un elemento y se convierte en una acción de intercambio de ideas que desembocan en una obra", dice.
"Durante seis meses hemos estado trabajando juntos, nos emociona hacer estos personajes e invitar a todos nuestros amigos a compartir con nosotros y con Dios, un momento de encuentro".
La exposición, además de los cuadros, estará conformada por una instalación realizada por ellos. También, un Dj va a estar haciendo música y están invitados un grupo de bailarines de break dance y algunos pintores de grafiti artístico pintarán en vivo.


LA EXPO
Nombre: Crisarth
Lugar: Iglesia La Misión, ubicada en Batallón del Paredón 2010, en la Colonia Francisco Villa
Hora: 18:00 horas
Fecha: Sábado 31 de enero

LOS ARTISTAS
DANIEL LARIOS
Tiene 24 años.
Estudia el noveno semestre de Arquitectura en la UAS y trabaja como auxiliar de arquitecto en Condominios Pacífica.
Se inclina por hacer caricaturas y le agrada el humor convertido en dibujo.
Desde hace cinco años no hace grafiti y con la exposición "Crisarth" regresa a exponer ante los demás su propuesta pictórica.

CARLOS LOAIZA
Tiene 25 años.
Es Licenciado en Diseño Gráfico por el Itesus y trabaja como diseñador en Ibalpe.
Sus obras se inclinan por la abstracción.
"Crisarth" es la segunda exposición individual que presenta.

LAS CLICAS (PANDILLAS)
A principios de 2000 existían más de 80 clicas o pandillas en Mazatlán, algunas de ellas estaban integradas por más de 100 jóvenes y tenían diferentes nombres.
SNA: Street New Art
HEM: Hechos En México
DUEK: Decoramos un Estado Criminal