"'Danzar es volar'"
CULIACÁN._Hablar de danza para Jorge Tapia Serrano es unir tres palabras: Danzar es volar, y de ahí se desprenderán cientos de historias como formador, bailarín y estudioso de esta disciplina a la que le ha entregado su vida.
Son ya 30 años de soñar, vivir y disfrutar del baile. Lo ha hecho desde que era un niño, cuando empezó en la escuela Velina León de Medina, después en la secundaria de Sánchez Celis, de Aguaruto, y actualmente en la Gabriel Leyva Velázquez de esta ciudad. También lo hace en su propio estudio.
Empezó a trabajar con una grabadora prestada pero siempre impulsado por las ansias que niñas y jóvenes tenían por bailar.
"Llego a los 30 años como maestro muy feliz; en este tiempo he convivido con la niñez, juventud, adolescencia y ahora con las hijas de las que fueron mis alumnas. Eso me llena de energía y vida", dice.
"Siempre tuve la inquietud por bailar, aunque de niño los maestros no me escogían para bailar, pero cuando estudiada en la Velina León de Medina, la maestra Martha Valenzuela miró mis inquietudes y tenía 12 años cuando ya estaba montando cuadros".
Al tiempo se atrevió y salió a la Ciudad de México a estudiar en Bellas Artes y en el Instituto de Investigación de la Danza Mexicana. Comprobó que era el camino que tenía que seguir y el que no dejará hasta mientras su cuerpo se lo permita.
"Me atreví a irme, me fui a la Ciudad de México sin permiso a estudiar, regresé y sigo siendo formador de generaciones".
'La danza es espíritu'
A Tapia Serrano siempre le gustó ser diferente, aunque se inició en el folclor y el ballet clásico, se inclinó por la danza polinesia.
"La danza además de ser muy bella, es espíritu, sus bailes son más allá de un simple baile, son un homenaje a la naturaleza, paz, amor al prójimo y a uno mismo. Los movimientos de manos son una lengua", menciona.
"El flamenco es toda proyección de fuerza, pasión, me gusta también por el vigor de su cultura".
Para el maestro todo ser humano puede bailar, de acuerdo a sus posibilidades, de ahí que si danzan las plantas, aves, viento, no hay quién no pueda hacerlo.
"La danza para mí es volar y soñar, es tener una ilusión en la vida por la cual lucharé siempre. Nunca me canso, los años me vigorizan más. Cuando uno nace con este don, lo tiene que cumplir siempre", considera.
"Danzar te permite estar vivo, porque cuando uno baila te imaginas tantas cosas buenas, afloran emociones, viajas a través del movimiento, el espacio. La danza no te permite estar enfermo, ni que te duela nada, siempre se tiene que bailar".
CELEBRACIÓN Mañana y el sábado se ofrecerá un festival para celebrar los 30 años en la danza de Jorge Tapia Serrano, en la Torre Académica de la UAS, a las 19:00 horas.
"La danza para mí es volar y soñar, es tener una ilusión en la vida por la cual lucharé siempre. Nunca me canso, los años me vigorizan más. Cuando uno nace con este don, lo tiene que cumplir siempre".
Jorge Tapia Serrano
Maestro de danza
