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"MÚSICA"

"De Italia, para enamorar"

"Nicola di Bari emociona a los culiacanenses al hacer una retrospectiva de su música, en la apertura del vigésimo Festival Internacional Universitario de la Cultura"
16/11/2015 09:51

    CULIACÁN.-Hasta el aire se "envolvió" en el romanticismo de Nicola Di Bari, cantante italiano que abrió el vigésimo Festival Internacional Universitario de la Cultura, con el que la UAS celebra su 142 años de fundación.

    Las sillas dispuestas frente al edificio central de la casa rosalina la noche del lunes, fueron insuficientes. La invitación al concierto del primer invitado en los 15 días que durará esta conmemoración fue exitosa, público de diferentes edades se emocionó de principio a fin, disfrutó las vivencias hechas canción por Di Bari.

    Antes de la presentación de quien es conocido como El Último Romántico, el Rector Juan Eulogio Guerra Liera, en compañía de parte de su equipo, así como de María Luisa Miranda Monrreal, directora del Isic, hizo referencia a José Vasconcelos quien alguna vez afirmó que la cultura engendra progreso, y sin ella no se puede exigir a los pueblos una conducta moral.

    "Conscientes de la capacidad transformadora de la cultura, y de su excelente papel en la difusión de los valores, los universitarios abrazamos las diversas manifestaciones del arte para cultivarlas en nuestros espacios y ponerlas al alcance de todos los públicos", subrayó.

    La edición 20 de este festival, añadió, se asume como internacional, con el respaldo de artistas y compañías de 7 estados de la república y seis países invitados, a través de convenios o de redes de colaboración.

    Se dijo orgulloso de la programación, que por primera vez supera los 200 eventos con espectáculos para todo tipo de auditorio, entre ellos conciertos de Moderatto, Raúl Di Blasio, un encuentro de bandas regionales y una clausura con Air Suply.

    "La luna llena se vuelve cómplice del romanticismo de Nicola Di Bari, que con sus canciones evocará bellos momentos y provocará que volvamos a enamorarnos", anunció de lo que posteriormente se vivió.

    Antes de la presentación de Di Bari, el público aplaudió la intervención de Lola Massey, quien compartió cuatro melodías con entrega, gustosa de estar en Culiacán.

    Con canciones rítmicas, la intérprete española transmitió como mensaje musical que la vida se debe gozar, que se debe estar gustoso de soñar y vivir.


    Di Bari, anécdotas y música
    Tantos caminos recorridos en 50 años de trayectoria, que uno de ellos lo trajo a Culiacán para que compartiera con quienes conocen su trayectoria, o bien los que acudieron con la intención de escucharlo en vivo, o los que quisieron conocerlo, una retrospectiva de su carrera.

    Con canciones vivenciales, un diálogo permanente con el público, Di Bari mantuvo cautiva a la concurrencia.

    Michele Scommegna, su nombre de pila, fue hilvanando su historia con letras como Vagabundo, vagabundo, algún santo me guiará. He vendido mis zapatos con un poco de libertad...

    Gritos y aplausos se oían como respuesta. Él se dijo estar vibrando, pues después de tantos años de estar dando la vuelta al mundo llegó a la capital sinaloense. Se sintió un privilegiado de abrir este festival rosalino.

    Era el cuarto día de mayo, estaba fresco tal vez con el propósito de que las almas se "abrazaran", se arrullaran con el sentimiento y calor que comparte Di Bari con sus canciones. Entre ellas El extranjero; la que le inspiró su hija, de la que dijo su nacimiento le trajo una experiencia única, pues le cambió la vida, a ella cantó Primera cosa bella.

    Una tras otra fueron melodías que Di Bari trajo personalmente para reafirmar entre sus fans la valía de su interpretación, y para "robarse" nuevos corazones. Así fue con la historia de Rosa, en la que narra cómo fue esa mujer que le dio la vida.

    Algunas más conocidas que otras, el repertorio fue para gozarse con Como las violetas, La historia de un amor, Los días del arcoiris; todos son retazos de su vida, por eso tal vez tienen un significado mayor para él.

    Cuando tocó el turno a El corazón es un gitano, el público reaccionó con emoción. Se trata de una melodía que le ha dado gloria y aún más reconocimiento al llevarlo a ganar el Festival de San Remo y con ello vino la internacionalización, por allá a principios de los 70.

    Di Bari llevaba más de una hora en el escenario, compartiendo las historias que lleva grabadas en su sensibilidad, cuando se despidió. Los aplausos lo hicieron regresar a la escena. Así corroboró lo que antes comentó, que sabe que el público de México, de Culiacán, lo quiere, y mucho, también dijo, lo agradece.

    Así, el cantante de 74 años se fue contento al sentirse "abrazado" por un público a quien por primera vez le canta en vivo, a quien le trajo mensajes vivenciales hechos canción, con una voz que sabe llegar al alma para enamorar.




    Recuerdo vivo de "El Negrumo"
    Un orgullo, un motivo de felicidad es para la familia de Enrique Sánchez Alonso que la UAS lo haya inmortalizado a través de una escultura. 

    La tarde del lunes, el Rector Juan Eulogio Guerra Liera develó una estatua del cantautor culiacanense en el área oriente de la Plazuela Rosales. 

    La silueta de "El Negrumo", con su infaltable guitarra está ahí para recordar al bohemio, al enamorado de la vida, de sus hijos, del amor, que dejó letras como Dios no lo quiera, 15 minutos, El Tacuarinero, Palabras ajenas, La gloria de un beso. 

    La emoción de este momento la vivió la señora María Bustamante Meza, a quien El Negrumo le dedicó varias de sus composiciones, ella lo reconoce con una gran sonrisa; así como sus hijos Jorge, Ricardo, Angelina, Chely y Cecilia Sánchez, y los nietos. 

    "Estoy contenta y feliz", expresó la señora María. "Una vez me dijo lo que siembras cosechas; m'ija van a pasar años para que a mí me reconozcan en Culiacán. Sí han pasado años, pero sí lo han reconocido, y hasta ahorita siguen. No tengo palabras para expresar lo que siento al ver esto". 

    Sabe que ella es el motivo de canciones como 15 minutos, Dios no lo quiera. entre otras. 

    Fue un padre amoroso, buen hombre con el que fue feliz hasta que Dios se acordó de El Negrumo, un 11 de julio de 1989. 

    "Lo van a estar viendo generaciones que no sabían cómo era mi papá. Estamos orgullosos de este homenaje", dijo Jorge Sánchez, arreglista y compositor.



    HOY, EN EL FESTIVAL
    10:00 horas._ Canciones de amor y desamor, mezzosoprano María Ávalos y el pianista Francisco Rocafuerte, teatro 

    Torre Académica
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    18:00 horas._ Presentación de los libros Espejo de doble filo y Por boca de la sombra, en la Escuela de Filosofía y 

    Letras de la UAS.
    19:00 horas._ Exposición fotográfica Vida y obra de Óscar Liera, en la Galería Frida Kahlo.



    PLACA CONMEMORATIVA 
    Ayer se develó una placa conmemorativa por el 142 aniversario de la UAS, en Mazatlán.