"Hidrátate"
Brendha Félix
El agua compone cerca del 60 por ciento del cuerpo, posee propiedades benéficas para el organismo y además es indispensable en los procesos de digestión, absorción, distribución de nutrientes, transporte y desecho de elementos tóxicos.
Bebiendo las cantidades recomendables de agua el hígado, los riñones, el sistema digestivo e inmunológico cumplen muy bien con sus funciones, se lubrican las articulaciones y mejoran la resistencia de los ligamentos.
El agua actúa además como protector, ya que controla la temperatura, ayuda a mantener los niveles adecuados de acidez en el cuerpo y retarda los procesos de envejecimiento. Un consumo equilibrado de este líquido ayuda también a mantener la belleza del cabello, las uñas y la piel.
El agua es un excelente colaborador cuando de perder peso se trata, ya que suprime el apetito y ayuda al cuerpo a metabolizar la grasa acumulada.
Una medicina natural
La ingesta de agua en cantidades apropiadas, reduce un 45 por ciento, el riesgo de cáncer de colon y a la mitad las probabilidades de desarrollar cáncer de la vejiga. Además estar hidratado reduce en un 79 por ciento el riesgo de padecer cáncer de seno.
Reduce también el riesgo de problemas cardiacos, además hidrata las mucosas que recubren la nariz, garganta bronquios y pulmones, disminuyendo las probabilidades de infecciones virales y bacterianas.
Se le ha atribuido también la disminución de la producción de cálculos o piedras en el riñón y la incidencia de las infecciones urinarias. También aumenta las sustancias para el control de bacterias en la boca evitando la gingivitis, caries y otras enfermedades de la boca.
Con información de clubplaneta.com.mx
¿Y SI NO?
El no beber la cantidad suficiente de agua provoca:
* Dolor de cabeza
* Fatiga
* Cambios de humor
* Calambres
* Dolores musculares
* Deshidratación
* Alteraciones de la vista
* Dificultades para tragar
* Delirio
* Ataques cardiacos