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"EL 2 DE OCTUBRE"

"Las consecuencias de una masacre"

"La académica Marina Quintanilla habla sobre el deslinde cultural de este movimiento social"
06/11/2015 11:06

    La represión del movimiento estudiantil del 2 de octubre tuvo consecuencias que han ido más allá de la masacre de los estudiantes; a cuatro décadas de distancia, la nación sigue siendo sumisa y callada, aseguró la académica y colaboradora de Noroeste Marina Quintanilla.
    En su ponencia 1968, Deslinde Cultural en México, la académica de la Asociación Internacional de Hispanistas, lamentó que 40 años después, se abran apenas los archivos históricos.
    "Los gobiernos lograron la masacre a nivel nacional por cuatro décadas más, porque hasta ahora seguimos sumisos y callados. Apenas hace dos años se empezaron a abrir los documentos del Archivo General de la Nación.
    En París, durante el Congreso Internacional de la asociación, que se celebró en La Sorbona, la también catedrática de la Universidad de Occidente, aseguró que los precedentes históricos de este movimiento, están en Francia, en la época de Napoleón, cuando se convirtió en una fuerte potencia y tenía gran influencia en México, donde nadie se consideraba culto si no conocía la cultura y el idioma francés.
    "Eso lo vemos en las generaciones de los emperadores rusos, Pedro el Grande empezó a llevarse arquitectos, pintores, maestros de ballet, que es de origen francés y su desarrollo más grande es en Rusia y luego se va a Cuba cuando se convierte en socialista. En México, casi todos los escritores, intelectuales y políticos se iban a hacer sus estudios a Francia".
    El gobierno de Charles de Gaulle se preocupó por que el pueblo tuviera mayor calidad de vida, pero no lo logró por la guerra de Vietnam, la liberación de las colonias y el país cayó en una fuerte depresión.
    La represión en Francia inició con la independencia de las colonias argelinas, el Gobierno no quería inmigrantes africanos y los oprimía. La manifestación madura se dio en 1964, cuando se unieron a ellos los estudiantes.
    Salieron a las calles a pedir igualdad en derechos, no segregación, buena educación, trabajo y buena pensión, y aunque la consigna era ser una manifestación pasiva, los masacraron.
    "Había muchos estudiantes mexicanos en Europa y más mexicanos que seguían la lucha por la igualdad, la democracia, la república. En México todo inicia con un pleito entre los de la Vocacional 2, del IPN, con la prepa Isaac Ochoterena, el 22 de julio del 68".
    En México gobernaba Gustavo Díaz Ordaz y las leyes no eran aplicadas por igual: había injusticias en todos los ámbitos. Entonces, estudiantes, presidentes, dirigentes estudiantiles, inspirados en lo que se vivía en el mundo, se reunieron para exigir igualdad, proclamaron la libertad sexual y empieza un rompimiento cultural.
    Las Bellas Artes rompieron con el rococó, el neoclasicismo que venía de la influencia francesa y surgen nuevas corrientes en la música, la literatura, la danza. Se buscaban nuevas perspectivas, nuevas miradas.
    "Era un rompimiento pero el gobierno tiene puros ignorantes y pensaron que era una revuelta, y empezaron a atacar a todos estos jóvenes".
    Muchos literatos, sociólogos, analistas, escritores pasaron días de cárcel porque se animaban a decir lo que pensaban, y el gobierno al modo de la época dictatorial, acallaron al pueblo.
    "Esas son las consecuencias que seguimos viviendo. Los universitarios, y lo digo con pleno conocimiento, no tienen ideales, no creen en nada y no les importa nada. Pero lo que más me impacta es la ignorancia tan espantosa que tienen, aunque hay excepciones", dice.
    "En Culiacán estamos teniendo un grupo mínimo, pero grande, de jóvenes delincuentes y no veo que el gobierno se escandalice. Tenemos una sociedad apática, indiferente, repelona sí, pero no actuante. Por qué, porque tiene miedo. Ya no se confía en nadie porque se ve que hay corrupción, en todos los niveles".
    El 2 de octubre no sólo lograron la masacre de los estudiantes, dice, sino la de toda una nación que por cuatro décadas seguimos sumisos y callados.

    PONENCIA
    La ponencia se basó en una serie de documentos que durante más de 30 años estuvieron resguardados en el Archivo General de la Nación y fueron expuestos en el Congreso Internacional de Hispanistas.