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EVANGELIZACION, EDUCACIÓN Y CULTURA

Mesopotamia

EVANGELIZACIÓN, EDUCACIÓN Y CULTURA

    Espíritus de reyes y profetas, vastos imperios y ejércitos poderosos, Abraham, Hammurabi, Darío, Eridú, Ur, Ugarit, Ninive, Babilonia, Asiría, Persia, el origen de la cultura Occidental, vivida en el crecimiento del hombre y después hecha historia escrita, con el gran invento de la palabra impresa y más allá en el tiempo, el mítico origen de un paraíso terrenal.

    Encerrada entre las arterias fluviales del Éufrates y el Tigris, nace y corre la leyenda, mezclándose con la historia, el hombre apostado en una vida, ya sedentaria, aprende a convivir en sociedad, dando origen a las primeras urbes de que se tenga memoria Eridú y Uruk, el paso siguiente fueron los imperios hegemónicos.

    Mesopotamia, término originado de las palabras griegas “meso” y “tamos”, viene a significar lugar entre ríos, es considerada como la cuna de la civilización occidental. Los registros arqueológicos datan de aproximadamente 6000 años a. C. cuando los grupos allí asentados empezaron a construir las primeras manifestaciones tecnológicas, consistentes en canales para hacer producir sus ricas tierras.

    Fueron los sumerios a quienes inicialmente se les atribuye el origen de la cultura urbana, a ellos también se les atribuye el notabilísimo y revolucionario invento de la escritura.

    Hacia el año 2330 a. C. los sumerios fueron conquistados en la invasión de los acadios, más belicosos que los anteriores, eran pueblos de origen semítico y aunque dominaron el territorio, la cultura inicial de los sumerios, sobre todo el gran legado de la escritura, subsistió en los conquistados.

    Sargon I, cuyo reinado se extendió de 2335 a 2279 a. C. fue el gran monarca fundador de la ciudad de Acad.

    En 2218 a. C. después de la caída de los acadios Ur, la mítica ciudad de Abraham, encabezaría una nueva hegemonía, cuyo dominio se extendió en todo el territorio mesopotámico, hasta caer en el año 2000 a. C. en manos de los elamitas quienes reinaron hasta que el Hammurabi, el gran legislador al frente de Babilonia unificó sus dominios, construyendo el primer gran imperio de la historia.

    Durante 400 Babilonia dominó la región, extendiendo su dominio hasta la frontera con el imperio egipcio, con quien compitió, adquiriendo un desarrollo notabilísimo incrementando su poder bélico y su comercio, así como el embellecimiento de sus ciudades.

    En 1350 a. C. los Asirios conquistaron el imperio Babilónico, produciéndose una mezcla de razas, llevando a una división entre los medos y los caldeos, quienes con Nabuconodosor II al frente dominaron Mesopotamia,

    Finalmente los dominios persas y helénicos se sucedieron hasta culminar con la dominación romana, con la cual entramos ya en la época descrita en los Santos Evangelios, cuando la Buena Nueva llegó a este mundo.

    Mesopotamia es el lugar donde nace la cultura occidental, y es también un punto importante en la referencia dentro del contexto cultural y geográfico de las Sagradas Escrituras. Su legado trasciende a sus límites materiales, llegando, con actualidad, hasta nuestros días.