Mi casa se vistió de Navidad
espera ansiosa que venga
el calor que emana la familia
se llenó de ángeles y duendes
de santas y niños dioses
de carcajadas en luces
y celestiales aromas
desde el primer domingo de Adviento.
Amo mi casa
la dulce compañía de sus paredes
el techo que me abriga y me protege
su piso de caricias
sus grandes ventanales
por los que se asoma al mundo
sus portones fuertes y robustos
que custodian la entrada a los amigos.
La amo
porque ella vibra
al son de mis sentires
somos una
unidas en el tiempo
y a las cuatro estaciones
somos mujeres
que engalanamos la vida diaria
decorando el alma
dejando historia
en cada uno de los rincones.
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