Nada más, lo suficiente

    Desde tiempos inmemoriales, la búsqueda de la felicidad es un tema recurrente en la vida de todos los científicos y los no científicos, todos han tratado de descubrir qué factores contribuyen a la satisfacción personal y, en particular, cuánto dinero necesitamos para alcanzar la felicidad. Harvard, una de las universidades más prestigiosas del mundo, ha llevado a cabo un estudio que arroja luz sobre esta cuestión. A través de extensas investigaciones, los académicos de Harvard han examinado la relación entre el dinero y la felicidad, y sus resultados son reveladores.

    Si el objetivo es encontrar la felicidad: ¿el dinero es un factor determinante? La búsqueda de la felicidad es un camino personal y subjetivo que no sigue un modelo rígido. Sin embargo, existen pautas básicas que promueven el bienestar emocional y físico en la mayoría de las personas, realmente es todo un debate que ha existido durante mucho tiempo.

    A través de extensas investigaciones, los académicos de Harvard han examinado la relación entre el dinero y la felicidad, y sus resultados son reveladores. Pese a que es el sueño de muchos, ganar la lotería es una fortuna que pocas personas tienen.

    Las investigaciones del estudio de Harvard sugieren que el dinero puede contribuir a la felicidad cuando se utiliza para cubrir necesidades básicas y permitir una vida cómoda

    Si bien el dinero no es lo más importante para lograr la felicidad, de acuerdo con diversas investigaciones realizadas por la Universidad de Harvard, sí es un elemento que influye en gran medida en el camino de lograr dicho estado emocional, debido a que las personas que poseen los recursos para cubrir sus necesidades básicas pueden enfocarse en otros aspectos de su vida.

    Sin embargo, dichas investigaciones también han encontrado que para lograr la felicidad debe existir un equilibrio en la importancia que tiene en nuestras vidas, ya que obsesionarse con él, y que conseguirlo sea el único objetivo (por encima de las relaciones personales), puede causar el efecto contrario.

    Los expertos afirman, que si se tiene la fortuna de cubrir tus necesidades básicas entonces se debería disponer más tiempo a cultivar las relaciones sociales pues muchos se enfocan en generar aún más y descuidan esta parte de sus vidas lo que, paradójicamente, los hace más infelicidad a pesar de su capital.

    “El dinero no puede comprar la felicidad, pero tampoco puede hacerlo la pobreza.” Esta frase de Leo Calvin Rosten resume que en ninguno de los extremos conseguiremos el sentido de bienestar y felicidad: en el balance puede estar la gran clave.

    Existe un ejercicio muy básico que me enseñó hace un par de años, el LAE y LM José Luis Ordóñez Zamudio, que radica en Culiacán, y nos vemos cuando vine a Mazatlán, un día me dijo y ¿sabes cuál es la cantidad suficiente para que vivas bien? “ esto de saber dónde está tu dinero es muy fácil, vas a tomar una hoja el primero del mes que sigue y ve anotando todo, pero todo lo que gastas y en qué lo gastas, aunque sea un chicle, y el último día del mes, divide los gastos en columnas: alimentos, gastos básicos de la casa, educación, vacaciones, medicinas, salidas sociales.....etc, al final te darás cuenta la cantidad que gastas en total en el mes, y si en realidad son gastos necesarios, si no los son, los debes de eliminar o reducir.

    Yo sugiero con frecuencia este ejercicio, porque te dice claramente cómo están tus finanzas y qué debes de eliminar, y cuándo llegas a la cantidad justa para vivir tranquilamente, obtienes paz y ésta te lleva a la felicidad, a vivir sin estrés, le bajas a la ambición y comienzas a disfrutar realmente de lo que tienes.

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