"Otra visión a la obra de Owen"
CULIACÁN._Una nueva teoría, otra visión de la obra de Owen propone el poeta y ensayista Javier Velázquez en su La llave de su reino (Tierra Adentro, UAS, 2010), considerado por Francisco Alcaraz y Marco Sanz como un libro ingenioso, audaz y escrito con una lucidez que pasma.
En La llave de su reino, Velázquez recupera el ambiente literario en el que el poeta sinaloense Gilberto Owen se vislumbró como poeta, y hace un análisis detallado de los poemas que componen su Perseo vencido, que publicó en 1948.
Sanz, dijo que con este ensayo se demuestra que la obra de Gilberto Owen se encuentra lejos de ser agotada.
"Es una obra que no sólo ha conseguido armonizar la forma con el contenido, sino que extrae hipótesis de lugares insospechados, de donde un lector atento no esperaba encontrar ya más nada. En ese sentido, se trata de un libro ingenioso, audaz, presto a confrontar sus ideas con las de quienes se han erigido como especialistas en la materia", comentó.
"Con La llave de su reino, Javier nos ofrece una lectura alterna de la obra de Owen. Distanciándose un poco de las conclusiones a las que nos tienen acostumbrados, por ejemplo, Tomás Segovia y Vicente Quirarte, él ha trazado un mapa hermenéutico que vaticina un nuevo sentido para Perseo vencido: en general, el último libro editado en vida de Owen no es más la bitácora de un amor imposible, truncado por los avatares de la distancia y del tiempo, sino la crónica del trabajo creativo del poeta, los derroteros que habrá que sortear si lo ha poseído la voluntad de adueñarse de un estilo propio y auténtico".
Alcaraz explicó que el libro se divide en tres partes: en la primera hace una puntual revisión de las lecturas anteriores, siempre con una franca deferencia hacia el trabajo ajeno, en la segunda aborda ese aspecto desatendido por la crítica hasta ahora: la parálisis, visible en el Madrigal por Medusa y las Tres versiones superfluas, que clausuran el poema y cierran el libro, que desde su perspectiva es un aporte significativo y finalmente glosa cada uno de los 28 poemas que conforman Simdbad el varado, encontrando el hilo conductor, revisando las influencias literarias y filosóficas y leyendo los símbolos y las alusiones intertextuales con gran fortuna y coherencia.
"Cabe destacar la principal virtud de todo el libro: su congruencia, su irrenunciable apego al texto que analiza, así como a otros poemas u opiniones del propio Owen o de sus compañeros de generación", apuntó.
Velázquez agradeció los comentarios de Alcaraz y Sanz y al público por compartir con él su libro, pues en tiempos difíciles y de barbarie como los actuales, "la literatura ofrece un reducto para el amparo".
"Mi propósito no es validar una teoría, sino rescatar un hecho que la crítica ha pasado por alto: la parálisis poética que a mi juicio tiene Perseo vencido, y se refiere a que muchos personajes owenianos, Simbad, Jacob, Perseo, comparten la paralisis, están inmóviles".
Su tesis, sostuvo, es que se trata de una escenificación de la muerte del poeta en su lucha contra la poesía, Perseo contra Medusa, que al mismo tiempo con su muerte, a manera de sacrificio, enfrenta Simbad contra los clásicos.
"Owen habría representado en su extenso poema el drama que estaban viviendo los poetas de su generación. En aras por convertirse en poetas fuertes, lucharon de manera férrea contra sus influencias poéticas, sus conciencias los paralizan, asfixiándolos. Ante la ortodoxia de las influencias que causa la parálisis creativa, Perseo vencido se erige en una contrafuerza, esa postura crítica del poeta da explicación de por qué se denominó a sí mismo como la conciencia teológica del grupo, pues fue relacionada directamente con la parálisis de Simbad y que comparten los demás personajes owenianos".
Durante la presentación, a la que acudieron académicos, escritores, editores, estudiantes de literatura, Javier comentó una serie de anécdotas que lo llevaron a escribir sobre el poeta rosarense.
Recordó que cuando estudiaba Letras, su maestro Élmer Mendoza les pidió un ensayo sobre la obra de algún poeta, y él no eligió a Owen, sino a Rubén Darío, pero un compañero sí lo hizo y compartió su texto con él.
"Yo no conocía a Owen mpas que por el nombre de la biblitoeca de Difocur, la que tenía Difocur. Posteriormente, ya para egresar de la licenciatura teníamos que hacer una investigación, tampoco escogí a Owen, preferí a Tomás Segovia, iba a hacer mi tesis sobre los sonetos votivos, y para hacer una buena investigación sobre su poesía tenía que ver toda su obra ensayística, y la verdad me deslumbré con su capacidad de abordar temas de lenguaje, lo antropológico, lo filosófico y descubrí los Cuatro ensayos sobre Owen y renació mi interés por la poesía de Owen".
Al final, decidió investigar a Owen y este libro es fruto de ese trabajo.
EL AUTOR
Javier Velazquez nació en Veracruz, en 1979. Ha participado en antologías como Los Límites acordados, Ocho poetas jóvenes sinaloenses, Antología poética, La permanencia del relámpago y Antología de poesía de Sinaloa.