"Plaga 'Madrigal' de recuerdos"

CULIACÁN._Parte de su emoción compartió Leopoldo Rodríguez Arvízu en su poemario Madrigal, el cual fue presentado en el patio del Archivo Histórico de Sinaloa.
El público escuchó los comentarios de la poetisa Rosy Paláu; Gilberto López Alanís, director del Archivo, y Martha Bonilla, editora de la publicación; y después se emocionó con el sentimiento con el que el autor dio voz a sus textos, haciendo más nostálgico el momento las notas del Cuarteto San Miguel.
López Alanís definió a la noche fresca, alegre y evocadora en la que volvió a resonar en el recinto histórico la voz de los Rodríguez, como lo hiciera don Rosendo hace 100 años, pero su voz fuerte, penetrante se transformó en una romántica, poética, sugerente, libre, en su hijo.
"La poesía de Leopoldo Rodríguez Arvízu es la libertad, un hombre de alguna manera sujeto a los rigores de la ciencia jurídica hoy ofrece su libertad de pensamiento", indicó el historiador.
Paláu refirió que el autor forma parte de un movimiento de figuras como Alejandro Hernández Tyler, Enrique "El Guacho" Félix, Enrique Peña Gutiérrez, Antonio Nakayama, Roberto Hernández, quienes fueron más allá de su cotidianidad, y con su espíritu creador volvieron trascendente lo que para muchos era un simple vivir.
"Pensadores, poetas, ensayistas, nos dejaron con su obra un mapa de nuestras raíces, de ese tiempo viene Leopoldo Rodríguez Arvízu, de esas caminatas por las calles en las que se podían contar los autos, del aire lleno de palomillas, de la emoción de escuchar el silbato de un cartero trayendo cartas que la prisa por abrir, obligaba a tratar de adivinarlas a contraluz", indicó la escritora.
Leer Madrigal, agregó, fue como abrir un álbum familiar, un acercarse de nuevo a aquello que permanece en la memoria, tan claro que casi se puede tocar, saborear.
"Madrigal es el recorrido de un hombre que se asoma, ve, descubre y luego cuenta y nos refleja; es el silencio donde también cabe el mar", señaló Paláu, que citó algunos poemas de Rodríguez Arvízu para hacer sus comentarios.
El sentir le entrecortó la voz. Rodríguez Arvízu agradeció el momento.
"Ciertamente mi manera de ser, mi emotividad está ligada íntimamente a cosas que pasaron, pero realmente mi única enfermedad sea la emotividad, y de ahí han salido algunos poemas", aseguró.
Se dispensó con los jóvenes porque leyó poemas para "gente vieja", se refería a los miembros de la generación 1952-1957 de la carrera en Derecho de la Universidad de Sinaloa, dos de ellos presentes en el evento.
Y esa voz fuerte, nostálgica del poeta habló con sentir de amigos que ya se fueron, a la gente "extraordinaria" del Pueblo Mágico de Cosalá. También dedicó su inspiración a sus hijos en Desconsuelo, a su nieta.
Transmitió sus pinceladas de nostalgia con las que delineó su libro Madrigal. Entregó ahí una parte de su emoción.


AUTOR
- Leopoldo Rodríguez Arvízu nació en Mazatlán, el 15 de noviembre de 1932.
- Es licenciado en Derecho egresado de la Universidad de Sinaloa y Notario Público.
- Fue director del periódico Tribuna de la UAS de 1952 a 1957.
- Secretario General de la Universidad de Sinaloa, maestro de ésta y de la UAS de 1958 a 1972; maestro fundador de la escuela Libre de Derecho.
- Fundador y primer presidente del Colegio de Abogados Eustaquio Buelna, A.C.
- En octubre de 2003 fue designado Huésped Distinguido de Cosalá.

OBRA La obra dada a conocer de Leopoldo Rodríguez Arvízu incluye los títulos: 'Retrospectiva', 'Sendero', 'Ópalo', entre otros.