"Recuerdan a Cantinflas"
MÉXICO (UNIV)._ A 15 años de su muerte, Mario Moreno Cantinflas, uno de los principales comediantes del cine mexicano, fue recordado por su nobleza y parodia, misma que transmite en cada uno de sus personajes como Su excelencia y El patrullero 777, con una muestra pictórica en España.
Dentro del décimo primer Festival de Cine de Málaga, la ciudad natal de Pablo Picasso, más de 400 fotomurales alusivos a la historia del cine español, se expusieron a lo largo y ancho del puerto andaluz.
Entre las imágenes se encontraban unas de Cantinflas en la película Don Quijote cabalga de nuevo (1972), de Roberto Gavaldón, así como algunas más de Jorge Negrete al arribar a Madrid en tren. Figuras mexicanas que forman parte del patrimonio fílmico español.
Sus inicios
Mario Moreno Reyes, mejor conocido como Cantinflas por el personaje que lo consagró en las pantallas, nació el 12 de agosto de 1911 en Santa María la Redonda, en la Ciudad de México.
De origen humilde, fue el sexto de una familia de 15 hermanos. Inició estudios de medicina para complacer a su padre, pero debido a la mala situación económica que vivía, tuvo que abandonarlos para ganarse un sueldo gracias a pequeños papeles en espectáculos de variedades.
Trabajó en el circo y pronto sus dotes para la interpretación, su ternura y visión optimista del mundo lo llevaron a recrear al prototipo de hombre vulgar y pobre de México.
El legendario personaje de Cantinflas fue inspirado por un barrendero "borrachito" que conoció cuando laboraba en el teatro Follies.
Boxeador, taxista, lustrador de calzado, cómico de carpa y bailarín, el artista personificó al "pelado" de los años 30, quien se caracterizó por sus pantalones a la cadera, sombrero y paliacate, que se enreda en un laberinto de palabras y expresiones.
En el cine
Su carrera en cine comenzó como publicista, en tanto que su primera aparición como actor fue en la película No te engañes corazón (1936), a la cual le siguió el filme Ahí está el detalle (1940), de Juan Bustillo Oro.
Sus primeras películas como El gendarme desconocido (1941) y Los tres mosqueteros (1943) fueron éxitos que rompieron récords de taquilla en América Latina.
Realizó alrededor de 50 filmes, entre los que se incluyen dos incursiones en el mercado de habla inglesa realizadas en Hollywood: La vuelta al mundo en 80 días (1956), que ganó el Óscar como Mejor Película; Pepe (1960), y otra dirigida en España: Don Quijote cabalga de nuevo (1972).
Sin embargo, lejos de las luces del escenario, Mario Moreno era un hombre solitario, introvertido, que no soportaba las mentiras y que se llevó decepciones, sobre todo en el ámbito familiar, según han referido a la prensa amigos y familiares del histrión.
Se mantiene su altruismo
También destaca su labor altruista que se ha mantenido incluso después de su muerte, por medio de dos fundaciones que desarrollan su tarea solidaria en México.
Miembro del Sindicato de Actores, Cantinflas fundó de forma benéfica la Casa del Actor y en 1952, y haciendo gala de la generosidad que lo caracterizaba, emprendió una campaña en favor de los pobres para construir un hábitat social.
Su nombre y todos sus derivados (cantinflada, cantinflear y cantinflesco) forman parte del diccionario de la Real Academia de la Lengua Española como un verbalismo vacuo, incongruente, disparatado y que mezcla muletillas.
La Organización de Estados Americanos le rindió un homenaje en su sede en Washington y lo nombró Embajador de la Paz, en reconocimiento a su labor de acercamiento entre los pueblos del mundo.
El pícaro actor y de expresiva dulzura se ganó a pulso un lugar en la historia de los espectáculos como Maestro de las Evasivas, por su singular forma de hablar sin concretar las ideas.
ARRANCA CARCAJADAS
- Cantinflas murió de cáncer pulmonar el 20 de abril de 1993, en la Ciudad de México, pero su personaje aún arranca carcajadas entre el público.
- Luego de recibir un sentido homenaje por parte del pueblo, en la sede de la Asociación Nacional de Actores, la cual dirigió un tiempo, y en el Instituto Nacional de Bellas Artes, su cuerpo fue incinerado y sus cenizas depositadas en la cripta familiar del Panteón Español, en el DF.
FILMES
- Entre sus filmes también destacan: ´El bombero atómico´ (1950), ´El señor fotógrafo´ (1952), ´El bolero de Raquel´ (1956), su primera película en color; ´Sube y baja´ (1958), ´El analfabeto´ (1960), ´El extra´ (1962), ´Entrega inmediata´ (1963), ´El padrecito´ (1965), ´El señor doctor (1965), ´Su excelencia´ (1966), ´Por mis pistolas´ (1968), ´Un Quijote sin mancha´ (1969) y ´El profe´ (1971), entre otras.