Karla Lozano
Hablando de turismo en el programa de radio web, en algunos cursos, en las aulas y por supuesto cada jueves en esta columna, ha surgido la necesidad de compartir su historia, interesante y amplia para percibir el surgimiento de tan noble actividad.
El turismo como tal, nace en el Siglo 19, como una consecuencia de la Revolución Industrial, con desplazamientos cuya intención principal era el deporte, la religión, el ocio, el descanso, la cultura, la salud o las relaciones familiares. Estos movimientos se caracterizaban por su finalidad, diferente de otros tipos de viajes motivados por guerras, movimientos migratorios, conquista, comercio, entre otros. No obstante el turismo tiene antecedentes históricos claros.
Durante los últimos años el turismo se ha convertido en una actividad prioritaria dentro del esquema económico y social de naciones industrializadas y en vías de desarrollo, debido a sus favorables efectos mediatos y a largo plazo: como la generación de divisas, la generación de empleos directos e indirectos con un costo más bajo comparado con otro sector económico. Esto es la generación de ingresos a zonas menos favorecidas, contribución a la actividad económica, social y administrativa del desarrollo regional así como promocionando actividades productivas complementarias del mismo.
También se le considera como una importante actividad económica que vincula necesariamente a demandantes y oferentes, constituidos los primeros por conjuntos de población pertenecientes a estratos de distinta condición económica que actúan de manera voluntaria, motivada o inducida.
El turista se desplaza hacia los destinos turísticos con inquietudes, intereses, propósitos, y deseos diferentes, como son restablecer el equilibrio sicofisiológico a través del descanso, apreciar los sitios naturales, culturales e históricos y practicar actividades tan diversas como nichos de mercado existe hoy en día.
Para el visitante, llegar a los lugares turísticos implica recorrer distancias más o menos grandes desde su lugar de residencia, utilizar diferentes medios de transporte y, una vez en su destino, permanecer como mínimo 24 horas, haciendo uso de alojamientos turísticos.
Lo que conlleva al interés por recibir calidad de los servicios básicos ofertados, mientras descubren nuevas necesidades e intereses. Los servidores turísticos que logran el éxito son aquellos que ofrecen verdadera calidad al turista. Los gustos y necesidades van variando, lo que es un hecho es que todo turista desea sentirse bienvenido, si a este le agregamos una sonrisa es seguro que logramos de su estancia la mejor, obteniendo el regreso multiplicado de quien nos visita.
Los viajes ilustran, está comprobado, sin embargo las personas viajamos por diversas cuestiones que suman una serie de sentidos comunes acerca de las razones para viajar, siempre digo que existen tantas razones para viajar como personas, ya que es muy respetable lo que cada quien decide. Algunas razones son:
* Viajamos para conocer personas, recordando el intercambio de los jóvenes de la nobleza inglesa previo a su vida matrimonial.
* Viajamos para saber más del mundo, para adquirir cultura en espacios geográficos diferentes a los nuestros.
* Viajamos para huir de la vida cotidiana, la primera razón de los viajes salir de la rutina, marca la pauta, como lo mencione antes, la Revolución Industrial y los tiempos sin trabajo.
* Viajamos porque tenemos espíritu viajero, la parte suprema de viajar, ese espíritu que despierta en ti desde pequeño y te permite ser todo un explorador.
* Viajamos para conocerse a sí mismo, la razón que tiene más peso desde mi punto de vista, ya que quien se da la oportunidad de viajar a su interior tiene un camino ganado.
Sea la razón que apliques, te invito a viajar, a descubrir y redescubrirte con todos los sentidos. Buen viaje y hasta la próxima semana.