"Sorprende Gabo en Recoveco"
Mary Pozas Amarillas
RECOVECO._ De manera secreta, avisando apenas media hora antes y por teléfono, Gabriel García Márquez llegó a Recoveco para sorprender a los estudiantes del CBTA 33 y al profesor Cruz Hernández Fermín, integrantes del Club de Lectura La Hojarasca, saludarlos, convivir con ellos y regalarles libros.
El autor de la célebre Cien años de soledad, considerada la novela más importante en lengua española después de El Quijote de La Mancha, de Miguel de Cervantes, llegó acompañado de su esposa Mercedes Barcha, su hermano Jaime y su cuñada Margarita, con quienes pasó Navidad en la Ciudad de México. Los acompañaba también Mónica Alonso, su asistente.
Hace ocho años, Hernández Fermín organizó la primera tertulia el 6 de marzo, en honor al cumpleaños de García Márquez y buscó la forma de hacerle saber que tenía lectores en este ejido perteneciente a Mocorito. Desde entonces, el colombiano les manda libros.
En 2007, el profesor, su esposa Alma y sus hijos Omar y Mercedes acudieron a una comida con García Márquez, en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, en la que él le preguntó cuándo se animaría a ir a Recoveco y éste le prometió que algún día.
"Un día de estos", le dijo en ese entonces, "voy a ir, pero sin mucho ruido".
Y cumplió. Los jóvenes emocionados le pidieron firmas en sus libros, fotos y él, con la generosidad que lo caracteriza, accedió. Pronto se corrió la voz en el pueblo y la gente se sumó a aquella fiesta literaria, en la que los jóvenes leyeron, comentaron y aprovecharon la ocasión para preguntar al escritor sobre su imaginario.
Jaime, el menor de los hijos del telegrafista de Aracataca confesó que aunque no escribe ni si quiera una línea de una carta de amor, en su familia tienen un deporte favorito, que es el de tratar de adivinar qué personajes de Gabito están inspirados en la vida real.
Y sin más cámaras que las de los pobladores, el Tío Gabo, como ahí le llaman, estuvo sonriente, hizo bromas y luego de cuatro horas de firmar libros, compartió una más, llena de anécdotas y vivencias en su natal Colombia.
Inocente palomita que te dejaste engañar... El contenido esta nota es una broma. Feliz Día de los Inocentes.