En mis manos acuno
al niño de mi corazón
pegado a mi cálido pecho
le ofrezco mi tierno amor.
Tengo lirios y azucenas
de tus padres para ti
oro, mirra e incienso
desde oriente han de venir.
Caminé por el sendero
del adviento y las posadas
pidiéndote a ti mi niño
las bendiciones deseadas
para los que festejamos
tu nacimiento adorado
en esta noche tranquila
de hace 2025 años.
Brillantes como la estrella
el aire siembra campanas
que nos guían a tu portal
para darte esta noche
nuestro abrazo fraternal.
¡FELIZ NAVIDAD!