"Baila Cancún con Shakira"
CANCÚN (NTX)._ Con una luna enorme de fondo y gritando "¡Cancún, esta noche soy toda tuya!", la cantante colombiana Shakira inició su concierto en la Riviera Maya ante más de 20 mil personas.
A lo largo de una noche espléndida, refrescada por la brisa del mar a unos cuantos metros del campo de golf de la cadena hotelera que ofreció este espectáculo a sus huéspedes y fanáticos, la novia de Gerard Piqué interpretó sus más sonados éxitos, sin dejar de mover un instante sus cadenciosas caderas que le han dado fama a nivel mundial.
"Estoy contenta por estar en México que es como mi casa", exclamó antes de cantar Sale el Sol y Si te vas, temas que escogió para abrir un repertorio de poco más de hora y media.
Prácticamente todos apreciaron el show parados en sus asientos, y el desorden reinó, al grado que las personas que pagaron hasta 8 mil pesos por un sitio en la zona VIP tuvieron que apreciar el espectáculo en las pantallas gigantes colocadas a los costados del escenario.
La gente gritaba eufórica, coreaba y aplaudía a su ídolo musical, entre ellos el Gobernador, Roberto Borge Angulo, quien junto con sus acompañantes consiguió uno de los pocos sitios de privilegio en el centro del campo.
A las 22:44 horas, la cantante agradeció a su público y anunció que terminaba el concierto; sin embargo, y tras 10 minutos de ausencia en el que la gente pedía a gritos "Otra, otra, otra", Shakira regresó para invitar a bailar a Cancún con Las caderas no mienten y un conjunto de exóticas bailarinas.
No fue suficiente. Después cantó Gitana, La tortura, Ciega, sordomuda, Loca y Rabiosa. El público exigió más y llegó la despedida con Waka Waka y entonces sí la euforia fue total en el campo de golf del Moon Palace.
Alianza en pro de la niñez
Shakira se reunió con el Gobernador de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, con el propósito de consolidar la alianza entre el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en el estado y la fundación ALAS, a favor de niños y niñas de cero a 6 años.
Antes de su concierto, la intérprete hizo un recorrido por el Centro de Desarrollo Infantil (Cendi), en donde se dio a conocer que la meta de este proyecto es atender a los niños en condiciones de vulnerabilidad, proporcionándoles una formación integral de calidad.
El convenio Alas para Quintana Roo parte de una voluntad de la sociedad civil y del gobierno del estado por erradicar la pobreza mediante el desarrollo integral de los niños y niñas de la entidad.
A partir del segundo semestre de 2011 comenzará la construcción de los dos primeros Centros Integrales de Primera Infancia en dos entidades municipales que representarán el modelo piloto para la puesta en marcha de los mismos.
El objetivo de esta iniciativa es construir 10 centros con una capacidad para 450 niños cada uno, quienes recibirán educación de primera calidad en zonas rurales y urbanas durante los próximos seis años.
