"El mundo se acaba"
MAZATLÁN._ Una vez más la humanidad y el planeta entero están al borde de la destrucción, o al menos eso es lo que asegura la cinta 2012, basada en la catástrofe global que, según algunos expertos, profetizaron los mayas.
El filme, protagonizado por John Cusack y que se estrena hoy en los cines del puerto, es la nueva aventura cinematográfica de Roland Emmerich, quien en su anhelo por destruir el mundo en la pantalla cinematográfica va logrando con cada nuevo título suyo un peldaño más de caos y perfección visual.
En este esquema, 2012 es su fantasía hecha realidad. No hay rincón del mundo que se salve del cataclismo anunciado como el fin del mundo, basado en el calendario maya, que determina que el término de la civilización humana es el 21 de diciembre del año 2012.
El origen de 2012 es la conocida, temida y rebatida teoría de que este calendario maya esconde tras su final la destrucción del mundo. En el filme, el evento que lo produce es la alineación del Sol, la Luna y la Tierra, lo que genera una enorme radiación solar y un desplazamiento del eje del planeta que se traduce en que, por ejemplo, zonas montañosas dan paso en segundos a abismos o que el nivel del mar sube centenares de metros, tapando regiones enteras.
La historia se centra en Curtis, un escritor separado y padre de dos hijos, que se ve involuntariamente al centro del conflicto al conocer pistas de lo que el Gobierno de Estados Unidos está preparando sigilosamente hace algunos años para salvarse del día del "juicio final".
El otro eje es el científico Adrian Helmsley, el mismo que advierte al Gobierno del cataclismo que está por venir y que observa impotente cómo hasta para el fin del mundo los únicos con "derecho" a salvarse son los que tienen dinero o están cerca del poder.
Así, con un presupuesto de más de 250 millones de dólares, 2012 no dará respiro al espectador, buscando que todas las expectativas de los amantes de los efectos especiales queden más que colmadas.
OTRAS CINTAS
Roland Emmerich es el responsable de cintas como "Día de la independencia", "Godzilla" y "El día después de mañana".
