"Euforia total con OV7"
MAZATLÁN._ OV7 está en su mejor momento. Los años, las vivencias y el haber estado separados por más de siete años le dio al grupo una gran madurez musical que irradia en el escenario.
En su reencuentro con la música, OV7 también se reunió de nuevo con el público mazatleco, al que le ofreció un concierto de calidad en la coronación de la Reina Infantil del Carnaval 2011, Gina Dalai, pues regresó renovado, con mejor voz en sus integrantes, una producción de primera y con más energía en los bailes.
Con 110 minutos de concierto, seis cambios de vestuario y 31 melodías, la agrupación mantuvo eufóricos a sus seguidores, quienes corearon y bailaron las interpretaciones de Óscar, Ari, Mariana, Lidia, Érika y M'Balia.
El inicio del recorrido musical con el grupo, que nació bajo el nombre de La Onda Vaselina, inició con Vuela más alto y prosiguió con Tus besos y Aum Aum. En esta última fue muy evidente el playback que los chicos realizaron. Y eso se repitió en las canciones más rítmicas, aunque para el público pasó inadvertido, ya que utilizaron pistas en las que dejaron el micrófono abierto para que no fuera tan evidente.
Cada uno de los integrantes fue presentando las canciones y hablando de su regreso. El primero fue Óscar, quien dio paso a que sus compañeros agregaran un accesorio plateado a su primer vestuario que era de color negro.
"Este es su show", dijo Óscar para interpretar Algún lado, Más que amor, No pares y Tengo el control.
"OV7 regresó porque los necesita", exclamó Mariana antes de interpretar Te necesito y Love colada.
Luego dedicaron su nuevo sencillo, Confieso, a Gina Dalai, quien no paró de bailar y corear todas las canciones de la agrupación.
"Ha sido increíble estar de regreso", mencionó Érika mientras sus compañeros se colocaban botas y sombrero, pues había llegado el momento de recordar los inicios del grupo.
OV7 lució un colorido vestuario que evocaba sus inicios, por lo que la nostalgia y los buenos recuerdos afloraron al interpretar Pónganse botas, quítense tenis, El primer adiós, Qué buen reventón, Quiero salir de vacaciones, Voy, voy, voy, Susanita tiene un ratón y Calendario de amor.
Luego, el grupo compartió un poco de lo realizado en su nuevo disco, Primera fila, al cantar en acústico Desbaratándome, Volveré, Como eres y Somos un corazón.
Tal y como comentó Ari en entrevista previa al show, Lidia cantó a capela una estrofa de El corrido de Mazatlán, mientras el público la ovacionaba.
Luego vino uno de los mejores instantes con su hit Prohibido quererme, aunque el momento cumbre aún estaba por llegar.
Los OV7 ya se habían despedido, pero la multitud los hizo volver y lo hicieron para cantar Un pie tras otro pie, mientras que Ari y Óscar sorprendieron a bajar del escenario y subirse en hombros de los elementos de seguridad para pasear por todo el campo y acercarse a saludar a los fans que se encontraban en la zona de central.
Con todo el público de pie entregado a su música, OV7 cantó Mírame a los ojos y No es obsesión y se volvió a despedir.
Pero para la gente era inconcebible que se fueran sin cantar uno de sus mayores éxitos, por lo que de nueva cuenta les exigieron volver para interpretar acompañados de un colosal coro mazatleco no sólo Te quiero tanto, sino también Locura de amor, éste ultimo marcó el final de su concierto.
Cenan con Poncho Lizárraga
A través del Twitter, Ari Borovoy agradeció a Poncho Lizárraga la sugerencia que le hizo de un lugar para comer mariscos. "Fuimos a echar unos mariscos a la carreta de Don Beto. Gran recomendación de nuestro querido Poncho Lizárraga".
Minutos después del concierto, Lidia Ávila comentó en la misma red social: "Compartiendo cenita con @ponchoLizarraga. Deliciosa comida acá en Mazatlán y la compañía y plática mejor".
EMOTIVO MOMENTO
Cuando M'Balia habló del reencuentro con sus compañeros, inesperadamente el público del área central empezó a gritar Kalimba, Kalimba, y al unirse la zona de campo a la aclamación en apoyo al trago amargo que vivió el músico