"Fusión de talentos"
ZAPOPAN._ La Orquesta Filarmónica de Jalisco perdió su sobriedad al compartir escenario con Banda El Recodo de Cruz Lizárraga, durante el ensamble que ofrecieron en el Auditorio Telmex con el fin de recabar fondos para la fundación Mi gran esperanza.
Esta vez el público de la Filarmónica dejó la formalidad de lado y se contagió del resultado que dio la orquesta al empaparse del sabor de Sinaloa a través de algunos de los éxitos logrados por El Recodo.
Con este concierto, El Recodo abrió un nuevo capítulo en su trayectoria de 72 años de carrera. El deleite no sólo fue musical, ya que el espectáculo contó con la participación del Ballet Folclórico de Jalisco, quien bailó al compás de las danzones, huapangos, cumbias, polkas y baladas que ofrecieron las clásicas agrupaciones.
Bajo la dirección de Enrique Radillo, la Filarmónica se dejó atrapar por la alegría de la música de tambora. No sólo su música se escuchó sinaloense, sino que también los integrantes de la orquesta fueron presa del gozo que invade al cuerpo con las notas que compartieron con El Recodo.
Ambas agrupaciones llevaron a los asistentes a una andanza por los inicios de El Recodo. Primero lo hizo la banda con Aires de Sinaloa, para luego dejar que la orquesta interpretara Lira de Oro.
El banquete que más de 120 músicos ofrecieron en el escenario se empezó a degustar en la tercera melodía, un tema que llegó al Carnaval de Mazatlán en 1960, Los amores de Julia.
El recorrido hizo alto en 1962, con El Chinito y Lola y esos fueron los temas donde el público empezó a perder la timidez para acompañar a los músicos con sus palmas.
El Recodo hizo que la multitud viajara con ellos hasta la Perla del Pacífico al interpretar Mazatlán, mientras imágenes del Clavadista, el Monumento al Pescador, Playa Norte y Zona Dorada se proyectaban en una pantalla.
El niño perdido vino a continuación para luego evocar los pasos dobles de España cañí.
A propósito de las fiestas del Bicentenario, las agrupaciones se volvieron a fundir en La rielera y después cambiaron de ritmo para interpretar un danzón de Amador Pérez, Nereyda.
Nuevamente el esplendor de Sinaloa se hizo presente con un tema que data de 1957 y que ha sido clave en la historia de Banda El Recodo, Cinco de chicle.
El regocijo se volvió a sentir con un popurrí conformado por clásicos del repertorio sinaloense, Huilotas, El elotito y Tecolotito.
Para el goce de la gente llegaron los temas más recientes de Banda El Recodo, esta vez, ya con las voces de Charly Pérez y "El Yaqui", vocalistas de la banda.
Un popurrí para enamorados, integrado por Para toda la vida, Deja, Gracias por tu amor y Yo tengo una ilusión puso al público a cantar.
El auditorio retumbó con los gritos de la asistencia al escuchar la entrada del siguiente tema, Me gusta todo de ti.
Otra de las infaltables fue Y llegaste tú, canción con la que El Recodo sonó más de 3 millones de veces en radio a finales de los 90.
Al encontrarse en Jalisco, El Recodo y la Filarmónica rindieron tributo al máximo artista que ha dado el estado, Vicente Fernández, interpretando No me sé rajar, La ley del monte y De un rancho a otro.
En el preludio de la despedida, "El Yaqui" tampoco resistió bailar El manicero, y al no contar con las chicas que en los bailes suben al escenario, el joven cantante tomó como pareja a una de las integrantes del ballet folclórico.
El adiós llegó con Te presumo, tema con el que intentaron poner fin al concierto, sin embargo, la gente los hizo volver entre fuertes ovaciones para despedirse dejando el sello de la música sinaloense con el Mambo del Taconazo.
120 músicos participaron
90 minutos duró el concierto
18 melodías interpretaron
HARÁN DVD
La Banda El Recodo grabará un DVD de esta presentación que ofreció junto a la Filarmónica de Jalisco.
