"Revelan vínculos de Estéfano con la santería"

"Revelan vínculos de Estéfano con la santería"
06/11/2015 10:22

    MIAMI (UNIV)._ El juicio contra el brasileño Francisco S. Oliveira por el intento de asesinato al compositor colombiano Estéfano reveló detalles de los vínculos que el artista mantuvo con la santería como miembro de la iglesia Ochosi de Yoruba.
    En las tres primeras sesiones del juicio, que se reanudará mañana, Estéfano expuso sus polémicos vínculos con su ex asesor financiero, el español José Luis Gil, al que acusó de ser el autor intelectual del intento de asesinato,
    Estéfano no dudó, además, en calificar a iglesia Ochosi de Yoruba, con sede en Miami, como una organización criminal donde presuntamente se planificó su muerte.
    "Gil es el autor intelectual (del supuesto intento de asesinato), la gente de la iglesia es una organización criminal, y él (Oliveira) es el ejecutor", dijo Estéfano en su extenso testimonio ante un tribunal en Miami.
    El compositor explicó que si él moría, el beneficiario directo de su fortuna hubiera sido Gil, quien manejó su carrera artística durante 12 años y al que consideraba como a su padre.
    Durante su testimonio, el compositor confesó que como parte de su nueva vida espiritual pasó de ser santo a babalao, una especie de sacerdote mayor dentro de esa religión.
    Ochosi, como se llama la iglesia donde se inició el artista, es una deidad de la santería del grupo de los orichas conocidos como guerreros y es el patrón de los que tienen problemas con la justicia.
    En su vida profesional, Estéfano gozaba del éxito artístico cuando comenzó la relación con la iglesia Ochosi: trabajaba como productor y compositor de cantantes como Shakira, Gloria Estefan, Marc Anthony, Ricky Martin, Julio y Enrique Iglesias; era galardonado con los Premios BMI Latino y los Grammy, y firmaba millonarios contratos con casas discográficas.
    "Firmé un contrato de 10 millones de dólares con Sony, y todo lo manejaba José Luis Gil, a través de dos corporaciones (que llevaban el mismo nombre), una en Estados Unidos y otra en Panamá", dijo Estéfano, en referencia a la empresa Advance Business Trading Inc, cuyo titular en los registros era Gil y no el artista.
    Estéfano dijo que en los últimos meses empezó a enterarse de los manejos financieros que había efectuado su ex representante, y además se llevó otra sorpresa al descubrir que los Suárez financiaban los honorarios de los abogados defensores de Oliveira, de 31 años.
    El juicio comenzó formalmente el miércoles y Oliveira, de 31 años, rehusó la oferta de la Fiscalía de una condena de 20 años en prisión, con la posibilidad de salir libre al cumplir la mitad de la pena.

    LOS HECHOS
    Según el colombiano, el 26 de mayo fue atacado en la cocina de su casa por Oliveira, mientras se encontraba en pose de meditación hindú. De acuerdo a su testimonio, recibió dos balazos: uno en el pecho y otro en la cabeza, detrás del oído derecho.