"Televisa, la fábrica...de los vetos"
MÉXICO (UNIV)._ Durante la historia de la televisora de San Ángel, se ha hablado de diversos vetos que da la empresa a muchos de sus artistas por diferentes razones, siendo las principales las de cambio de televisora o diferencias profesionales.
Trascendieron casos como el de la pareja Capetillo-Gaytán, quienes sorprendieron en el año 2011, de un día para otro Capetillo, quien había participado en la telenovel Soy tu dueña, estaba sentado en las filas de la televisora del Ajusto junto con su esposa, se dijo que esto se debió a problemas con altos ejecutivos.
Hablando de la televisora del Ajusto y Soy tu dueña, la actriz Gaby Spanic, de ser la coprotagonista junto a Lucero, recibió el supuesto veto por querer hacer proyectos dentro de la empresa a la que pertenecía y saltó a la otra televisora.
Después de años de pertenecer a la televisora de San Ángel, Ricardo Arjona fue vetado por no elegir a una compañía de eventos para realizar su gira por México, lo que tiene al artista sin preocupación alguna, ya que él dice no saber qué pasó y no es algo que le quite el sueño.
A Verónica Castro, la televisora la vetó por tres años en 1983, después regresó, pero al terminar de grabar Los exitosos Pérez, se dice que la actriz recibió otro veto.
Itatí Cantoral, a raíz de su participación en El sexo débil, de Cadenatres, se dice que fue vetada, además de que al parecer tuvo problemas con ejecutivos de la empresa.
En 1989, tras aceptar grabar la telenovela Balada para un amor y después abandonarla, el actor Jorge Rivero fue vetado por San Ángel.
Una de las más recientes es Liliana Arriaga "La Chupitos", quien en meses pasados se presentó en Ventaneando y declaró que no gozaba de una exclusiva con su ex televisora. El problema surgió cuando decidió irse a trabajar a Estados Unidos.
Con dinero 'baila' Lucero
MÉXICO (UNIV)._ La cantante Lucero llega en plan de "reina" a la cadena hispana Telemundo, desplazando a la "joya" de la empresa Aracely Arámbula.
Mientras a la cantante le pagarán 23 millones de pesos (más de un millón y medio de dólares) por participar en el reality Yo soy el artista por (13 programas), a La Chule, por tres telenovelas le pagaron, según cifras, aproximadamente un millón de dólares.
La contraparte de la "jugosa" oferta hecha a la también actriz, a grandes rasgos, es la "pérdida" de su imagen, pues la cláusula de su contrato le prohíbe realizar cualquier tipo de anuncios y campaña publicitaria, excepto en las que la compañía esté de acuerdo.
