Pues así como hay emociones que facilitan aprender, también hay las que lo dificultan, y la más importante es el miedo que bloquea no solo a la memoria, paraliza todo.
El miedo no es un sinsentido, no es que sea malo, lo necesitamos, existe por algo y es salvaguardarnos del peligro inminente, con el que tenemos que tener cuidado es justo el sinsentido.
Tenemos derecho a tener miedo, pero también a saber cómo controlarlo en lugar de que nos controle y paralice, y que aparezcan fobias difíciles de controlar, primero hay que aprender a entenderlo, controlarlo. Porque tal cosa me causa miedo, desde cuándo, “es que me mordió un perro cuando era chica y lo quise acariciar”, pues sí, pero no significa que todos muerdan sino que debo aprender cómo acercarme, todos deberían de saber que no todos los perros están acostumbrados a que les toquen, a muchos no les gusta que les toquen la cabeza, pero sí otras partes.
Preguntar en lugar de quedarse con el miedo, las personas valientes no significa que no tengan miedo pero saben controlarlo, y ese controlarlo es tan gratificante esa sensación de yo puedo que es la puerta a cualquier cosa que se proponga uno y los hijos merecen.
Cuidado porque nuestros miedos podemos transmitirlos a los hijos, es una herencia muy mala, yo temo a las alturas pero logro desconectarme si es necesario y mis hijas se lanzan en paracaídas, tirolesas y lo que sea, lo que me hace muy feliz, evito por todos los medios estar en medio de una muchedumbre, pero si sucede no doy la nota, pierdo el estilo con una maripozota café no con un ratón o víbora, supongo todos tenemos nuestras filias y fobias.
Los miedos que paralizan, los que de verdad tenemos que erradicar como el miedo a lo que piensen de mí, a quedar en ridículo, a no saber defenderme de quienes manipulan, ofenden, maltratan, se burlan, quienes se aprovechan de sus puestos de autoridad, el famoso bullying que causa depresión, ansiedad,tristeza, soledad, y hasta muerte.
La manera de quitarnos esos miedos es enfrentándolos algunos de poco apoco, otros marcando la raya desde un principio, crece cuando no se hace nada, dice el dicho que los malos llegan hasta donde los buenos le dejan, de modo que mostrar miedo es como picar al malo si no ven miedo le quita el chiste a la maldad.
En estos tiempos de violencia desatada tenemos que aprender los mayores y los chiquitos a ser valientes ante las amenazas reales y controlar en lo posible, deben saber los chiquitos que hay cosas que no deben hacer y qué hacer cuando se sientan en peligro, no aceptar dulces o regalos de nadie, no irse con nadie aunque les diga que su papá o mamá los mando, dar de gritos pidiendo auxilio, saber su dirección su teléfono y el nombre de sus papás, no se trata de meterles miedos que no tenían sino de que sepan conducirse en situaciones peligrosas.
Tan peligrosas como las de fuera son las de dentro de casa si queremos que aprendan lo que se enseña en la escuela y lo que enseñamos, mínimo procurar un ambiente relajado de armonía, paz, no pueden aprender si les gritamos, se vuelven sordos, no pueden aprender si sus padres pelean todos los días eso les causa las mismas sensaciones y sentimientos que el bullying, sentir que en cualquier momento ya no van a tener familia sentirse culpables sin serlo,como van a concentrarse en aprender nada.
Seguro los padres se enfrentaron en algún momento a presentar exámenes,y que habiendo estudiado a la hora de la hora se borró de la mente todo por la ansiedad y reprueban un drama, para quien no estudia no hay tanta adrenalina, miedo, ansiedad y estrés, lo mismo que sucede en el aula sucede en casa, padres estresados automáticamente bajo rendimiento y dispara el fracaso entran en bucle de: no sé, no puedo, no valgo, para que me esfuerzo es imposible para mí.
No olvidar que las emociones son como vasos comunicantes, aumenta la calma, disminuye el estrés, aumenta la confianza disminuye el miedo, significa que tenemos que generar emociones que favorezcan el aprendizaje de las materias de la escuela y de las materias de vida en la casa.
Otra emoción limitante del aprendizaje el aburrimiento que desconecta entra por un oído sale por otro el cerebro no se queda con nada porque no presta atención, si aumento la curiosidad disminuye el aburrimiento, ¿cómo? haciendo preguntas, inventando juegos, jugando se aprende muy rápido, jugando con las tareas del hogar en lugar de pedir mil veces que ordenen sus juguetes, en kínder y preescolar aprendían cantando y jugando, sigue siendo así pero se los quitamos.
Otra emoción que bloquea es la envidia, el aprendizaje competitivo, estar pendientes de lo que hace el otro, porque se está comparando, genera ta tensión que es imposible relajarse, no tiene por qué ser nadie excelente en todo, podemos pedir que hagan su mejor esfuerzo nada más, todos tenemos habilidades para algunos temas y para otros no.
El punto está en darnos cuenta de los estados emocionales que se generan y muy importante la “alimentación” con poco natural y mucho prehecho y peor chatarra, no ayuda a la atención al interés a aprender.