"MazDinero"

"Las tarjetas de crédito impagables"
06/11/2015

    Francisco Coppel Azcona

    sta semana la bolsa mexicana se vuelve a ligar al desempeño de los mercados estadounidenses, aunque soportando en mayor medida la presión ante una economía más sólida y la expectativa, aunque con los problemas actuales suscitados por el PRD en el Congreso, de que pueda ser aprobada la reforma de Pemex.
    Para la semana que entre reportarán muchas de las empresas que cotizan en bolsa sus resultados del primer trimestre de este año, si son conforme se esperan, y se arregla el problema de la toma del Congreso y Senado por el PRD, la bolsa pudiera llegar a tocar los 32 mil puntos.
    En cuanto al tipo de cambio, técnica y fundamentalmente la moneda mexicana puede seguir obteniendo ganancias frente al dólar presentando un soporte en 10.50 unidades.
    Esta semana el Banxico dará a conocer el monto diario a vender para el periodo mayo-julio como parte del programa de desacumulación de reservas internacionales, cuyo nivel estará entre 30 a 33 millones de dólares frente a 20 millones de dólares actuales, un aspecto más de apoyo para el peso.
    En el mercado de futuros el peso se cotiza para finales de 2008 en 10.86 pesos por dólar, por lo que dados los niveles actuales se mantiene la recomendación de ir comprando posiciones escalonadas en dólares.
    Hemos recibido diversos correos electrónicos de lectores que nos hacen preguntas con respectos a problemas que tienen con sus tarjetas de crédito y con respecto a su costo real.
    La verdad es peor ya que el crecimiento de la propaganda comercial bancaria de hacer el menor pago mínimo mensual por el uso de la tarjeta de crédito y la mala información que las instituciones bancarias dan a sus clientes sobre este tema, representan un conflicto que puede crecer fácilmente, pues a los usuarios de las tarjetas no se les aclara que cubriendo el mínimo y a pesar de dejar de utilizar sus tarjetas, no terminarán de pagar en varios años.
    La razón es que la estructura de las tasas de interés cobradas por los bancos en créditos al consumo y en particular en tarjetas de crédito, hacen que los saldos insolutos se tornen impagables.
    Para muestra un botón, de acuerdo a la Conducef la tarjeta de crédito más cara cobra una tasa anualizada del 152.5 por ciento y la más barata el 49 por ciento.
    Sin embargo por el lado de las alternativas de ahorro tradicionales, los bancos solo pagan el 2.5 por ciento al año y que contra la inflación resultan inclusive tasas negativas o sea que el ahorrador pierde. El diferencial entre las tasas de interés de los créditos contra las de ahorro, es utilidad para los bancos.
    La ambición bancaria por mayores utilidades a costa de clientes mal informados y con poco conocimiento financiero ha ocasionado que hasta las mismas autoridades estén inconformes, fustiguen el hecho, e intentan poner topes en las tasas de interés que los bancos cobran en sus créditos y que aumenten las tasas de las alternativas de ahorro que pagan a sus clientes.
    La tarjeta de crédito es tan buen negocio para los bancos que en solo tres años el número de tarjetas emitidas por ellos se triplicó, al pasar de 7.8 millones de tarjetas que había a finales de 2002, a poco más de 24 millones de tarjetas en 2007.

    Correo: fcoppel@actinver.com.mx