"Vox Pópuli"

EL ROSARIO._ "¡Estoy muy emocionada de estar aquí, mi madre me enseñó a amar a su tierra, a su gente, al lugar que la vio nacer. Deben ustedes de sentirse muy orgullosos de haber tenido a una rosarense que cantó por todo el mundo, llevando el nombre de El Rosario a muchos foros internacionales. Yo amo a este pueblo, al que tanto quiso mi madre. Viva, Lola Beltrán!"... expresó María Elena Leal Beltrán antes de entonar Cucurrucucú, el himno de la máxima exponente de la música vernácula, Doña Lola Beltrán.
DOCE AÑOS han transcurrido ya desde aquella tarde de duelo mundial, en que el Creador, por sus sagrados designios, llamó a la cantante rosarense, nacida para entregar a México su voz desgarradora y bravía. Hoy, su dulce cantar entona alabanzas en los espacios gloriosos, mientras los amantes de la música que ella hizo inmortal, elevan en su recuerdo sus canciones.
EL HOMENAJE póstumo que el Alcalde César Ramírez Patiño y su entusiasta equipo de colaboradores, encabezado por la bellísima Nancy Hubbard Collada, se anotó un contundente éxito en la preparación y presentación del mismo. No hubo un sólo detalle que se les escapara. El escenario lució sencillo, no así el programa diseñado para los centenares de espectadores que se aglomeraron en la explanada municipal. En la fachada del Palacio, pendían tres imágenes de Lola, que nos conectaban rápidamente a su rica trayectoria artística.
La proyección de imágenes de la homenajeada y un desfile de cantantes locales, entre los que figuraron Tania Crespo, Brianda y Víctor Osuna, sirvió de marco para presentar el platillo fuerte de la noche. Primero apareció Nadia Yuriar, quien no dejó dudas sobre su calidad interpretativa y la potente voz que posee se apropió del escenario y no permitió que saliéramos del éxtasis al que nos llevó con su actuación, acompañada del Mariachi culiacanense Sol de mi tierra.
La artista surgida de Televisa se despidió dejando eufórico al pueblo que pedía más y más de sus canciones, pero ya las conductoras de evento Ingrid Rentería y Nancy Hubbard debían instalarse en la secuencia del festejo. Y la algarabía femenina se desató cuando apareció en el escenario el descendiente de la familia Negrete: Lorenzo Negrete.
Vestido con un elegante traje charro café y una voz que nos hizo recordar al ídolo de la Época de Oro del Cine Mexicano bajó del escenario para cantar con Francisco Beltrán (hermano de Lola), María Elena Leal Beltrán, Esther Uzeta y bailar con todas las damas hermosas nacidas en este Mineral.
Féminas de todas las edades le pidieron se acercara a ellas, dada la sencillez del artista y la gallardía que les encantó. Se acercó a la hija de Lola para llevarla a entonar a dueto Paloma Negra y el público les agradeció las emociones que les hicieron sentir al bajar del cielo a dos grandes del folclor mexicano: Lola Beltrán y Jorge Negrete.
Culminado el ovacionado número, María Elena, dirigiéndose al pueblo rosarense, agradeció el amor hacia su madre y manifestó la cariñosa disponibilidad que siempre tendrá para apoyar este homenaje que las autoridades le ofrecen. Luego nos deleitó con No Volveré, Cuando salgo a los campos, La fiesta de las flores, Amor Eterno, entre muchas otras que coreamos con ella mostrándonos inmenso agrado de unirnos a su alegría... Transparente, agradecida, plena, exitosa, muy querida y feliz fueron virtudes que le observamos a la hija de tan grande artista rosarense y es que María Elena le ha dedicado parte de su vida al apoyo de comunidades católicas en la Unión Americana, donde reside con sus hijos Mauricio y Lola; esta actividad le permitió cumplir el sueño de su madre de rendir tributo a la Virgen María, para quien ya grabó un disco, en el que nos compartió un tema que grabó en el mismo y con el que tanto recuerda a nuestra Lola: Cuando dos almas... Le imprimió tal sentimiento que suponemos voló a abrazarse y dejarse arrullar en los brazos de su protectora... Y nos dejó contemplarla en ese canto que sólo duró unos minutos, pero que nos supo a horas... ¡Gracias María Elena Leal Beltrán! por tu amor incondicional por este Rosario y por la grata presencia en los homenajes a nuestra embajadora. ¡Eres y serás el único y el más íntimo nexo que nos transporta a nuestra recordada Lola Beltrán!
LA SABIDURÍA sanadora de Don Lauro, el sacerdote Maya, llega de nuevo al terruño el próximo jueves y se instalará como siempre en la residencia de la apreciable Olga Martha Gómez Flores... ¡Para sentirse óptimo y entusiasmado cada dia de su vida, solo haga cita y digame si no le cambió el destino!...
A MIS lectores, gracias por su amable atención. Si Dios quiere y ustedes también, el próximo viernes nos volveremos a leer… ¡Esto es Vox Pópuli, la voz del pueblo!