"Dan sepultura a niños asesinados en Brasil"
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RÍO DE JANEIRO (AP/NTX)._ Mientras padres y madres de las víctimas lloraban desconsolados frente a los féretros, se procedió ayer a enterrar a los 12 niños asesinados a balazos el jueves en las aulas de su escuela en Río de Janeiro, Brasil.
Un helicóptero negro de la policía arrojó pétalos de rosas blancas sobre los dolientes y la nación se empeñaba en buscar una respuesta a la tragedia.
En un cementerio sobre una colina que da al vecindario de clase trabajadora donde ocurrió la masacre un día antes, más de mil personas se congregaron para los primeros funerales.
Noelia Rocha, madre de Mariana, víctima de 12 años, gritaba "¡Mi amor! ¡Mi amor!" cuando depositaban el féretro de su hija en una tumba de cemento. La mujer desconsolada tuvo que ser asistida por personal médico.
Un hombre a quien identificaron como el padre de Gessica Pereira, de 15 años, ayudaba a transportar su féretro, pero parecía desorientado y luchaba por mantenerse erguido en la procesión fúnebre.
Al colocar el féretro en la tumba el hombre gritó: "¡Vete con Dios!" y empezó a aplaudir. Quienes lo rodeaban lo acompañaron en el aplauso.
Diez niñas y dos niños de 12 a 15 años fueron muertos a balazos el jueves dentro de su escuela, la mayoría alineados contra una pared donde Wellington Oliveira, de 23 años, les disparó en la cabeza desde corta distancia. Llevaba dos pistolas y, después de ser enfrentado por la policía, se suicidó. Por lo menos otros 12 estudiantes resultaron heridos en la escuela pública Tasso da Silveira. Dos de ellos están graves.
Algunos detalles empezaron a conocerse sobre el hombre armado, como que era buen estudiante pero con antecedentes de problemas sicológicos, una fascinación con los ataques terroristas del 2001 en Estados Unidos y con los videos que enseñan a disparar armas. Pero quienes lo conocían dijeron que nunca habrían imaginado que pudiera haber perpetrado tal acto de violencia.
Según otras versiones, el joven presentó un comportamiento extraño desde la muerte de su madre adoptiva, el año pasado, y fue definido como una persona tímida e introvertida, que pasaba largas horas navegando por Internet.
De acuerdo con la policía, en la carta que dejó el hombre quedaba claro que la masacre fue premeditada, ya que dejó instrucciones sobre la forma en que debía ser enterrado y pidió perdón a Dios por los crímenes.
El Alcalde de Río, Eduardo Paes, asistió a los primeros funerales.
"Esta es una tragedia que conmovió la ciudad", dijo.
"Nada de lo que podamos hacer devolverá a los niños. Todo lo que podemos hacer ahora es ofrecer consuelo a las familias, y eso es lo que estamos haciendo aquí", dijo.
Expresa Papa pesar
CIUDAD DEL VATICANO (NTX)._ El Papa Benedicto XVI expresó ayer su "profunda consternación" por la masacre registrada el jueves en una escuela de Río de Janeiro, que dejó como saldo 12 niños muertos e igual número de heridos.
En nombre del Pontífice, el Secretario de Estado del Vaticano, Tarcisio Bertone, envió un telegrama al Arzobispo de Río, Orani Joao Tempesta, en el cual manifestó su solidaridad con los familiares de los fallecidos.
En el mensaje, Joseph Ratzinger invocó consuelo espiritual para los padres que perdieron a sus hijos, mostró su cercanía con toda la comunidad escolar e hizo votos por la pronta recuperación de los heridos.
"Nada de lo que podamos hacer devolverá a los niños. Todo lo que podemos hacer ahora es ofrecer consuelo a las familias, y eso es lo que estamos haciendo aquí".
Eduardo Paes
Alcalde de Río de Janeiro