"Recibimiento histórico"

WASHIGTON (NTX)._ El Papa Benedicto XVI pisó ayer territorio estadounidense en la Base Aérea Andrews donde fue recibido por el Presidente George W. Bush, la primera dama y cientos de invitados especiales.
El Jerarca católico descendió de una escalera de peldaños rojos del Shepherd One (Pastor Uno) de Alitalia, en cuya cabina ondeaban los banderines de EU del Estado Vaticano.
El grupo caminó sobre la alfombra roja; el Pontífice y el Presidente intercambiaron sonrisas y se dirigieron a una zona de invitados especiales para sostener una breve conversación privada.
Es la primera ocasión vez que el Mandatario recibe personalmente en la Base Aérea a una personalidad extranjera, lo que simboliza la importancia de la visita.
"Que Dios te Bendiga", rezaba una pancarta de mosaicos ondeada por jóvenes estudiantes en la pista de aterrizaje.

Promete Jerarca católico evitar casos pederastas
Benedicto XVI exclamó sentirse profundamente avergonzado por el escándalo de abusos sexuales que conmovió la Iglesia católica estadounidense y se comprometió a trabajar para garantizar que no haya más sacerdotes pederastas.
"Constituye un gran sufrimiento para la Iglesia en Estados Unidos, para la Iglesia en general y para mí personalmente que esto haya podido ocurrir´´, expresó el Papa. "Me resulta difícil comprender cómo fue posible que sacerdotes traicionaran de tal manera su misión... ante estos niños".
"Estoy profundamente avergonzado y haremos todo lo posible para que esto no vuelva a suceder´´, afirmó el Papa.
El Pontífice prometió que los pederastas no serán ordenados sacerdotes en la Iglesia católica.
"Decididamente excluiremos a los pederastas del ministerio sagrado", expresó el Pontífice en inglés. 

Pedirá Pontífice por migrantes

El Papa Benedicto XVI afirmó ayer que pedirá al Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, comprometerse con el desarrollo de los pueblos latinoamericanos para otorgar justicia a los inmigrantes.
"He visto la profundidad del problema de la inmigración, sobre todo la división de las familias, esto es un peligro para el tejido social y para los valores humanos", dijo.
"Sobre este punto deseo hablar con el Mandatario Bush, agregó, porque Estados Unidos debe ayudar al desarrollo de los pueblos, esto es en el interés de todos".
Durante un encuentro con la prensa internacional a bordo del avión que lo traslada a Estados Unidos, el Pontífice respondió sobre los retos de la presencia hispana en ese país.
El Obispo de Roma aseguró que conoce bien el problema migratorio y afirmó que la solución de fondo será que estas personas no salgan de su país.
"Debemos trabajar todos juntos con el objetivo de que el desarrollo social pueda ofrecer las posibilidades a los ciudadanos para obtener un trabajo digno", ponderó.
Consideró que el problema primario y fundamental es ayudar a que los niños sean protegidos, además hacer todo lo posible contra la precariedad y la violencia para que los inmigrantes puedan tener una vida digna. 

Intensifican
seguridad
por visita

Autoridades estadounidenses desplegaron ayer intensas medidas de seguridad para el acceso de cientos de invitados especiales y periodistas a la Base Aérea Andrews ante la llegada del Papa Benedicto XVI.
Alrededor de 500 invitados especiales, 250 reporteros fotógrafos y camarógrafos, así como 200 miembros del arquidiócesis de Washington fueron acreditados para la llegada del Jerarca católico.
La prensa tuvo que esperar más de dos horas para ser escoltada desde el centro de la capital a la Base Aérea, ubicada en el estado de Maryland, tras pasar rigurosas inspecciones por detectores de metal y perros policías.
Del hotel los invitados fueron llevados en autobuses especiales a la Base Aérea, escoltados por patrullas motorizadas de la policía de Washington.
En los esfuerzos de seguridad colaboraron el Servicio Secreto las fuerzas de seguridad locales de Washington , la policía de Nueva York y el Departamento de Estado


CIFRAS

Más de 5 mil 300 periodistas fueron acreditados para la cobertura informativa 


mil tienen acceso a áreas restringidas. 

visita de lujo
El acto garantizará la máxima pompa y circunstancia. Los detalles, discutidos hasta el mínimo detalle, incluyen una banda de la infantería de Marina que interpretó ambos himnos nacionales, seguido de una salva de 21 cañonazos, un gesto que los asesores del Papa aceptaron a regañadientes. Para contrarrestar las resonancias marciales, la Casa Blanca contrató a la prestigiosa soprano lírica Kathleen Battle para cantar el Padrenuestro. Acto seguido, los dos jefes de Estado sendos se reunieron en el Despacho Oval. 


"He visto la profundidad del problema de la inmigración, sobre todo la división de las familias, esto es un peligro para el tejido social y para los valores humanos"

"Me resulta difícil comprender cómo fue posible que sacerdotes traicionaran de tal manera su misión ante estos niños´´.