"El mexicano está habituado a las crisis: UNAM"
MÉXICO._ El mexicano ya se habituó a las recesiones económicas, y para sobrellevarlas se refugia en actividades o festividades, porque son una manera de ignorar escenarios críticos, ya sea través del futbol, fiestas patrias, viajes o reuniones con amigos y familiares, expuso Ricardo Trujillo Correa, académico de la Facultad de Psicología (FP).
De acuerdo con el boletín de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el mexicano actual pertenece a la llamada "generación de la crisis" que lleva 30 años experimentando condiciones adversas y ya está acostumbrado a las dificultades y a dar por hecho que todo lo que le rodea está mal, reveló.
"Se siente inconforme con su entorno y está consciente de los altos cobros en productos y servicios, pero aún así no pierde su ánimo festivo", afirmó Ricardo Trujillo.
Atendiendo a una psicología inmediatista, agregó, que el connacional se asusta y modifica su conducta ante declaraciones alarmistas o al saber que su empleo o patrimonio están en riesgo; sin embargo, a diferencia de lo que pasa en otras partes del mundo, el mexicano no actúa con temor o, si lo hace, es de forma irracional.
Un ejemplo frecuente de esto, que raya en el folclor, se da cuando un padre de familia viaja con toda su familia a Acapulco, sin un peso en la bolsa, con la esperanza de que a su regreso "ya verá cómo hacerle". Para un estadounidense, que en las mismas circunstancias optaría por encerrarse en casa para gastar lo menos posible, este comportamiento resultaría temerario, explicó.
Por esta razón, la llamada "teoría del shock financiero", que promueve escenarios graves para generar miedo social e imponer medidas gubernamentales drásticas, funciona de manera muy diferente con un anglosajón que con un mexicano, porque este último tiende a compensar situaciones catastrofistas y reales con indolencia, ejemplificó.
Ricardo Trujillo detalló que los partidos de futbol sirven de válvula de escape a muchos malestares personales, al igual que las fiestas, sólo así se explica que haya personas que "echen la casa por la ventana" para celebrar, aunque esto los ponga al borde de la precariedad. "Se trata de un ánimo festivo que pretende compensar lo crítico",comentó.
Otro episodio que evidencia cómo es nuestra comunidad, se manifestó en la emergencia sanitaria, la gente se asustó en un principio ante la posibilidad de enfermarse, pero volvió rápidamente a la normalidad y adoptó una postura anticrisis rayana en lo irracional. A partir de un hecho estresante o amenazante, el mexicano le apuesta al "sí se puede" como si fuera un mantra con el que resolverá todo sus problemas", detalló.
Añadió que desde épocas de la Colonia, el mexicano se sojuzgó a una alta burguesía que le impuso su orden, y que para contrarrestar esta situación optó por responder con ironía o sátira en vez de hacerlo con rebeldía.
El psicólogo declarpo que:"Cuando se presenta una dinámica de dominio, el mexicano responde con albures y burlas ante el poderoso". Esta actitud podría parecer conformista, pero es producto de una lógica social que cree que toda adversidad es superable, explicó.
"No sé si esta forma de pensar sea sana o no, pero nos mantiene vivos, festivos o animados, y sirve de sustituto a reclamos ante el gobierno", aseveró.
Al respecto, agregó que aunque reaccionar festivamente y con humor suena ilógico, esto parece funcionar de alguna forma, porque en culturas más racionales y enfocadas al éxito como Estados Unidos, Japón y Alemania, hay índices muy altos de suicidio y depresión.
El caso mexicano es atípico, y por ello requiere ser analizado bajo un contexto particular y no de teorías como la del shock financiero, "porque nosotros distorsionamos la realidad y la modificamos en sentido opuesto y de forma negativa. Por ejemplo, si nos dicen no habrá crisis, inmediatamente pensamos que tendremos una", señaló.
Estas interpretaciones tienen que ver con una asunción de que hay un conquistador y un conquistado, y que cada uno tiene una realidad distinta. Esto explica que además de México, otros países de América Latina compartan esta propensión, por eso es importante adecuar nuestros puntos de vista y teorías a un universo que es diferente al de las "culturas dominantes", expuso el secretario técnico de la Coordinación de Psicología Social de la UNAM.
Desde una perspectiva económica
Manuel Coello Castillo, académico de la Facultad de Economía (FE), señaló que la teoría del shock financiero se volvió de particular importancia para México a partir de que el secretario de Hacienda y Crédito Público empleara ese término para comunicar que el país atraviesa una fuerte crisis económica.
"No es de extrañar que más adelante digan: 'Estamos al borde de un choque económico y, por tanto, se deben tomar estas medidas, por difíciles que sean, para solucionar las cosas, de lo contrario la situación empeorará'. Lo que hay detrás de ese razonamiento es la idea de que es mejor aplicar políticas no democráticas a no tomar ninguna", detalló el economista.
Coello opinó que el gran problema de México es que en los últimos 20 años la economía no ha crecido; por tanto, se debe de resolver el problema a partir de la construcción de un proyecto de nación que permita entender y plantear el rumbo de nuestro país.
A su vez, se deben generar instituciones adecuadas, porque éste es el camino para estructurar una economía a mediano y largo plazo, de lo contrario se daría un proceso de confrontación, producto de la miseria y desempleo, resaltó.