"Motín en un centro juvenil de Chetumal"
MÉXICO (UNIV)._ Los 52 reos del Centro de Internamiento para Adolescentes Infractores de Chetumal, Quintana Roo se amotinaron ayer armados con machetes, piedras y palos sometieron al jefe de custodios y a sus cuatro subordinados, en protesta porque el interno Héctor Samuel López Aguilar, "El Virus" fue separado del resto de la población y trasladado a un modulo.
La rebelión inició a las 10:30 horas y terminó una hora después, tras ingresar la policía estatal al lugar. El saldo fue de cuatro agentes heridos por las pedradas y personal administrativo con crisis nerviosa.
Al inicio del motín, empleados del Centro de Internamiento pidieron auxilio al servicio de emergencia 066 y de inmediato un centenar de policías estatales encabezados por el secretario de Seguridad Pública, Salvador Rocha Vargas se trasladaron al lugar, ubicado en la comunidad de Calderitas a tres kilómetros de Chetumal.
La policía ingresó y aunque fueron recibidos a pedradas, conminaron a los jóvenes a entregarse y concluir con este altercado. Minutos después, al verse rebasados en número, por parte de los agentes, los menores infractores se entregaron.
Para evitar otro motín, autoridades penitenciarias decidieron trasladar al Centro de Readaptación Social de Chetumal, a Carlos Enrique Montero Magaña, Elías Guadalupe Manjarrez Cahuich, Johnny Santiago Victorin, recluidos por delitos de robo, homicidio y violación.
Una decena de personas, que laboran en el lugar fueron atendidos por crisis nerviosa.
Falsa alarma en Durango
La mañana de ayer se activó el Código Rojo en Gómez Palacio, Durango, al trascender que había un conato de riña en el Centro de Readaptación Social No. 2.
Un operativo formado por fuerzas federales y del estado arribó al penal, además de que un helicóptero del Gobierno de Coahuila sobrevoló el área cercana.
La presencia policíaca y militar inició a las 10:30 de la mañana y concluyó poco después de las 12:00 horas en que se comprobó que no había tal altercado.
Directivos carcelarios dijeron que quizá la confusión vino cuando un grupo de reos traspasó el área "muerta", es decir, la zona que divide el patio y las instalaciones administrativas.
Mientras, afuera del penal la desesperación y zozobra intranquilizó a familiares de los internos que llegaron a temprana hora para aprovechar la visita, y se les permitió la entrada hasta después de la una de la tarde.
El pasado viernes se suscitó una riña en esta cárcel con saldo de tres presos muertos, al día siguiente, el sábado, otro pleito con igual número de fallecidos.