"Volvería a las armas último de los villistas"
MONTERREY (EFE)._ El último villista vivo, Juan Carlos Caballero Vega, quien fue chófer del revolucionario Francisco "Pancho" Villa (1878-1923), aseguró ayer en su cumpleaños número 109 que volvería a tomar las armas ante tanta injusticia que existe actualmente en México.
"Espero que Dios me permita llegar al Centenario de la Revolución Mexicana", dijo Caballero durante el festejo en el asilo de ancianos donde se encuentra en el municipio de Guadalupe, en la zona metropolitana de Monterrey.
Francisco Villa, cuyo nombre real era Doroteo Arango, fue uno de los principales generales de la Revolución Mexicana, primero contra las tropas de Porfirio Díaz y después al frente de la División del norte contra Victoriano Huerta, quien usurpó el poder en 1913, tras mandar asesinar al Presidente Francisco I. Madero.
El longevo revolucionario afirmó que la desigualdad social y las injusticias que vive el país están creando las condiciones para un nuevo levantamiento armado contra el Gobierno.
"Si eso ocurre, me volvería a levantar en armas por esa causa", afirmó Caballero, quien recibe una pensión de mil 600 pesos mensuales por ser un veterano de la Revolución.
"Si hay necesidad (de una nueva Revolución), ahí estaremos. Si Dios nos concede vida le entramos", enfatizó el ex chófer.
"Cuando me uní a las fuerzas del general Francisco Villa, nosotros no éramos pobres, mi familia tenía varias propiedades", recordó Caballero Vega.
Aseguró que se sumó a las filas de la División de Norte que encabezaba Villa para ayudar a los "fregados" por el Gobierno.
"Pancho Villa todo el tiempo se preocupaba por ayudar a los pobres, siempre les daba dinero", aseguró el antiguo conductor del General.
Contó que cuando le solicitó a Francisco Villa quedarse en el Estado de Chihuahua porque había soñado a su madre muerta, el General le dio un puñado de centenarios que se los entregó a su familia.
Aseguró que estuvo como dos años y medio como chófer de Pancho Villa y entre otras batallas le tocó participar en la invasión al poblado estadounidense de Columbus, Nuevo México.
"Éramos como 300 ó 400 dorados (soldados), y fuimos varias veces a conseguir parque (balas) y armamento", recordó el villista.
Mencionó que una de las causas por las que Pancho Villa invadió el poblado, el 16 de marzo de 1916, fue que le habían engañado al venderle unas cajas de parque con balas de salva.
"Eso nos orilló a vengarnos", recordó Caballero.
Agregó que cuando asesinaron al General Villa, él ya había dejado de ser su chófer.
Villa es uno de los personajes revolucionarios más populares en México, sobre el que se han creado numerosas historias y mitos, y su vida ha sido reseñada en numerosas biografías y películas que destacan su genio militar.
Murió asesinado en una emboscada el 20 de julio de 1923 en la población de Parral, en Chihuahua, varios años después de que se había retirado de la lucha armada.
"Si hay necesidad (de una nueva Revolución), ahí estaremos. Si Dios nos concede vida le entramos".
Juan Carlos Caballero Vega
Ex revolucionario