Prevención ante nueva temporada de huracanes y otras emergencias

18/05/2025 04:00
    Lo mejor de esto es que sabemos que los lectores confían en nosotros, nos buscan y nos consultan para enterarse, pero también para corroborar lo que escuchan o ven en otros medios o plataformas, pues seguros están de que nosotros informamos siempre de manera seria, profesional, con ética y honestidad, máxime cuando se trata de vidas, de seguridad humana y maneras de enfrentar una posible situación de emergencia, o bien descartar riesgos.

    Con el huracán de violencia que nos azota desde septiembre pasado en Sinaloa tal vez pareciera poco importante poner atención en los ciclones reales.

    Nos referimos a que ya inició la temporada de huracanes en el Océano Pacífico y con ello la constante alerta en la que entramos como periodistas.

    Ciertamente, al inicio de la temporada lo que establecemos es una etapa de monitoreo, más que nada, de estar alertando a los lectores de la formación de los primeros ciclones, los cuales no alcanzan a llegar hasta la altura de Sinaloa, pero los medios tenemos la obligación de señalarlos para ir entrando en una especie de sintonía entre los lectores y la prevención, que es el objetivo máximo que tenemos como medio, servir al lector como brújula y guía en situaciones de posible emergencia.

    El Centro de Información Conjunta (JIC) de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), en su documento titulado “Mensajes de preparación y seguridad para huracanes, inundaciones y desastres similares”, señala claramente: “El mensaje adecuado dado en el momento adecuado por la persona adecuada puede salvar vidas”.

    No podríamos estar más de acuerdo. Lo importante de comunicar la prevención es eso: el momento justo, sin alarmar y a través de medios serios y profesionales.

    Por eso nosotros aprovechamos y usamos nuestra credibilidad para llevar esos mensajes de prevención.

    Sin buscar la espectacularidad o el drama, hacemos lo necesario para estar informando a tiempo, de la forma más mesurada posible pero con la suficiente firmeza, según se vaya dando el caso.

    Lo mejor de esto es que sabemos que los lectores confían en nosotros, nos buscan y nos consultan para enterarse, pero también para corroborar lo que escuchan o ven en otros medios o plataformas, pues seguros están de que nosotros informamos siempre de manera seria, profesional, con ética y honestidad, máxime cuando se trata de vidas, de seguridad humana y maneras de enfrentar una posible situación de emergencia, o bien descartar riesgos.

    Y ese es el compromiso que mantenemos en esta nueva temporada de huracanes que recién inicia y que nos dura en esta región prácticamente seis meses, la mitad del año, concluyendo en noviembre.

    Por supuesto que este tiempo de ciclones es como la referencia máxima de prevención que debemos dar y solemos hacerlo, sin embargo, la prevención y las alertas están vigentes en otra situaciones de posible crisis. Nos referimos, por ejemplo, al caso opuesto de los huracanes, que es la sequía que enfrentamos en nuestros poblados, en el campo, situación que es ya realmente alarmante.

    Respecto a esta crisis hídrica que enfrentamos, hemos también estado no sólo previniendo sino sobre todo ya alertando, pues ya es un problema preocupante.

    Así que podría parecer contradictorio que alertemos de una y otra cosa, de la falta de lluvias y del posible exceso con la llegada de un ciclón, pero así debe ser. La alerta y la prevención funciona en ambos lados, y como medio lo tenemos claro.

    Por eso podrá ver en nuestras páginas, por ejemplo, los reportajes que hemos publicado en coordinación con Conselva, la organización científica ambiental que se dedica al estudio de las cuencas hídricas en Sinaloa.

    Podrá ver también entrevistas con líderes agrícolas, donde se alerta de la situación de sequía que se está padeciendo en el campo. Columnas y artículos de opinión donde especialistas hablan al respecto también están siendo publicadas de manera constante.

    O por ejemplo estos últimos días, donde nuestros reporteros se dieron a la tarea de recorrer el municipio más lejano que tenemos, que es Choix, donde luego de entrevistas con pobladores concluimos que en esa zona del estado están más preocupados por la falta de agua que por la inseguridad o la ola de violencia.

    Y también este fin de semana hemos estado alertando por lo que sería la primera ola de calor severo de la temporada.

    Todo esto nos ayuda incluso a nosotros a poner en perspectiva lo que padecemos en cada región del estado y nos ayuda a cumplir nuestra misión de informar con un enfoque de prevención y de alerta.

    Así que aprovechando el arranque de una nueva temporada de huracanes, refrendamos nuestro compromiso con la prevención en beneficio de las personas, sin alarmar ni dramatizar, buscando siempre ser un vehículo confiable de información útil, en tiempo y en forma.

    Confíe en nosotros, lo hacemos pensando en usted, lector, siempre.

    Con el huracán de violencia que nos azota desde septiembre pasado en Sinaloa tal vez pareciera poco importante poner atención en los ciclones reales.

    Nos referimos a que ya inició la temporada de huracanes en el Océano Pacífico y con ello la constante alerta en la que entramos como periodistas.

    Ciertamente, al inicio de la temporada lo que establecemos es una etapa de monitoreo, más que nada, de estar alertando a los lectores de la formación de los primeros ciclones, los cuales no alcanzan a llegar hasta la altura de Sinaloa, pero los medios tenemos la obligación de señalarlos para ir entrando en una especie de sintonía entre los lectores y la prevención, que es el objetivo máximo que tenemos como medio, servir al lector como brújula y guía en situaciones de posible emergencia.

    El Centro de Información Conjunta (JIC) de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), en su documento titulado “Mensajes de preparación y seguridad para huracanes, inundaciones y desastres similares”, señala claramente: “El mensaje adecuado dado en el momento adecuado por la persona adecuada puede salvar vidas”.

    No podríamos estar más de acuerdo. Lo importante de comunicar la prevención es eso: el momento justo, sin alarmar y a través de medios serios y profesionales.

    Por eso nosotros aprovechamos y usamos nuestra credibilidad para llevar esos mensajes de prevención.

    Sin buscar la espectacularidad o el drama, hacemos lo necesario para estar informando a tiempo, de la forma más mesurada posible pero con la suficiente firmeza, según se vaya dando el caso.

    Lo mejor de esto es que sabemos que los lectores confían en nosotros, nos buscan y nos consultan para enterarse, pero también para corroborar lo que escuchan o ven en otros medios o plataformas, pues seguros están de que nosotros informamos siempre de manera seria, profesional, con ética y honestidad, máxime cuando se trata de vidas, de seguridad humana y maneras de enfrentar una posible situación de emergencia, o bien descartar riesgos.

    Y ese es el compromiso que mantenemos en esta nueva temporada de huracanes que recién inicia y que nos dura en esta región prácticamente seis meses, la mitad del año, concluyendo en noviembre.

    Por supuesto que este tiempo de ciclones es como la referencia máxima de prevención que debemos dar y solemos hacerlo, sin embargo, la prevención y las alertas están vigentes en otra situaciones de posible crisis. Nos referimos, por ejemplo, al caso opuesto de los huracanes, que es la sequía que enfrentamos en nuestros poblados, en el campo, situación que es ya realmente alarmante.

    Respecto a esta crisis hídrica que enfrentamos, hemos también estado no sólo previniendo sino sobre todo ya alertando, pues ya es un problema preocupante.

    Así que podría parecer contradictorio que alertemos de una y otra cosa, de la falta de lluvias y del posible exceso con la llegada de un ciclón, pero así debe ser. La alerta y la prevención funciona en ambos lados, y como medio lo tenemos claro.

    Por eso podrá ver en nuestras páginas, por ejemplo, los reportajes que hemos publicado en coordinación con Conselva, la organización científica ambiental que se dedica al estudio de las cuencas hídricas en Sinaloa.

    Podrá ver también entrevistas con líderes agrícolas, donde se alerta de la situación de sequía que se está padeciendo en el campo. Columnas y artículos de opinión donde especialistas hablan al respecto también están siendo publicadas de manera constante.

    O por ejemplo estos últimos días, donde nuestros reporteros se dieron a la tarea de recorrer el municipio más lejano que tenemos, que es Choix, donde luego de entrevistas con pobladores concluimos que en esa zona del estado están más preocupados por la falta de agua que por la inseguridad o la ola de violencia.

    Y también este fin de semana hemos estado alertando por lo que sería la primera ola de calor severo de la temporada.

    Todo esto nos ayuda incluso a nosotros a poner en perspectiva lo que padecemos en cada región del estado y nos ayuda a cumplir nuestra misión de informar con un enfoque de prevención y de alerta.

    Así que aprovechando el arranque de una nueva temporada de huracanes, refrendamos nuestro compromiso con la prevención en beneficio de las personas, sin alarmar ni dramatizar, buscando siempre ser un vehículo confiable de información útil, en tiempo y en forma.

    Confíe en nosotros, lo hacemos pensando en usted, lector, siempre.