Después de las lluvias que han ocurrido la semana pasada en Culiacán hay varias razones por las que ya hay que preocuparnos, pues son detalles que pueden volverse más peligrosos todavía.
La más importante es el arroyo de El Piojo, que después de las intensa lluvia registrada la madrugada de este domingo en Culiacán provocó su desbordamiento que dejó daños en al menos 10 viviendas de la colonia Ignacio Allende.
Los daños fue precisamente por las precipitaciones del domingo que se acompañaron de tormenta eléctrica y fuertes rachas de viento.
El otro punto al que hay que ponerle atención es a la presa derivadora, que ya comenzó a desbordarse.
En este punto es cuando comenzamos a observar cómo los niveles del río Culiacán, que por ende del río Humaya y del río Tamazula.
Este hecho provocó que para este fin de semana ya hayan ordenado además el cierre de los espacios que abarca el parque acuático junto a la Isla de Orabá.
El punto a tomar en cuenta es que si bien es cierto todos esperábamos ya que las lluvias pudieran devolver el agua a nuestras necesidades tanto agrícolas como de uso común, también hay preocupaciones, cómo siempre en nuestra ciudad, por las aguas.
No por nada sabemos temer a lo que una lluvia fuerte puede hacernos a los vecinos de Culiacán.
La buena noticia es que las información que hemos publicado acerca de estos hechos ha salido o lleva la opinión o diagnóstico de la Coordinación Municipal de Protección Civil, lo que nos lleva a pensar que las autoridades están enteradas de lo que acontece, por lo que esperamos que no pase nada más allá de lo que nos pueda sorprender sin que haya heridos o víctimas mortales.