No hay un solo día en que nos levantemos sin una “bomba” en los noticieros, día tras día México transita a través de un territorio minado, donde al menor pantallazo explota una nueva noticia que sacude a la opinión pública, el problema es que las bombas son, casi siempre, muy dañinas.
Ayer, apenas nos habíamos recuperado del reclamo furibundo de las mujeres frente a Palacio Nacional y los argumentos risibles del Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien simplemente no entiende lo que significa la violencia de género, cuando una nueva noticia sepulta el ruido pasado e instala uno nuevo frente a nuestras pantallas.
Una Senadora mexicana, Sylvana Beltrones, apareció en primera plana del diario español El País, y no lo hizo como ejemplo de algo bueno, sino involucrada en un depósito millonario en uno de los paraísos fiscales de Europa, Andorra.
Para que usted tenga una idea, Andorra es un pequeñísimo principado incrustado en Los Pirineos, en un rinconcito de la frontera entre Francia y España, famoso por ser un paraíso fiscal donde hasta hace poco primaba el secreto bancario.
Pues resulta que el diario El País reveló que la Senadora, que por cierto es hija del ex Gobernador de Sonora y ex líder nacional del PRI, Manlio Fabio Beltrones, tuvo una cuenta con 10.4 millones de dólares en ese paraíso fiscal.
Entrevistada por el diario, la Senadora da como argumento un vericueto verbal más intrincado que los pasillos fiscales en Andorra La Vieja, donde queda claro que lo único que buscaba era esconder ese dinero.
Ahora comienza el baile político de siempre, los opositores al PRI se abrirán las venas exigiendo que la Senadora sea castigada junto con todos sus cómplices, el PRI guardará silencio y seguramente al final no pasará nada.
Mañana o pasado mañana explotará otra “bomba” mediática y todo lo que hablamos ahora desaparecerá en el mundanal ruido del estercolero que es la política mexicana.
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