"Panistas atascados"

Después de la tormenta viene la calma, aunque parece que el Partido Acción Nacional está destinado a jamás vivir la calma.

 

Nacido en medio de una persecución atroz, asfixiado y marginado por décadas por el entonces partido único, el PAN consiguió sobrevivir y convertirse en una oposición seria que consiguió lo impensable: el poder nacional.

 

Pero el largo y desgastante camino hacia el poder lo transmutó y terminó convertido en algo parecido a lo que había combatido durante su existencia, en un partido irreconocible, donde la mayoría de sus fundadores y seguidores ya habían sido expulsados de sus filas.

 

Hoy, después de haber llegado a la silla presidencial y haberla perdido, su futuro se antoja difícil y por lo menos oscuro.

 

Quizá su única ventaja es haber salido “menos pior” que el PRI durante el pasado proceso electoral, pero está lejos de ser una opción viable para el futuro de muchos estados y del País.

 

El sábado se realizó la sesión de Consejo Político posterior a la elección del 1 de julio, en la Ciudad de México.

 

Con el pesar y la derrota en el aire, los consejeros estatales se reunieron a rumiar la derrota, pero lo sorprendente es que ni siquiera fueron capaces de tomar decisiones de cara al futuro.

 

En el aire sigue la elección de un nuevo presidente nacional, un tema que se antoja, por lo menos, polémico. Y si los panistas nacionales no pueden ponerse de acuerdo, imagine la situación en los estados, donde no se da un paso si no consiguen ver humo blanco en las reuniones nacionales.