Este jueves inicia la temporada de huracanes en las costas del Pacífico mexicano y se hace necesario recordar la importancia de contar con las medidas preventivas adecuadas para evitar tragedias.
Los principales responsables de que la población se sienta segura es el Estado mexicano, al generar la información oportuna para que cada una de las personas tome las medidas preventivas a tiempo.
Además, con esas alertas tempranas, permite también a las autoridades en lo local tomar las acciones para que la población en zonas vulnerables puedan alojarse en sitios más seguros.
También, en los ámbitos locales, en cada comunidad, las autoridades deben repasar los sitios que representan un mayor riesgo para la población para hacer las adecuaciones necesarias y minimizar esos riesgos.
En esta temporada en que la vulnerabilidad se incrementa, es obligación de quienes gobiernan resolver los puntos en que la población podría verse más amenazada para que la temporada de huracanes, y de lluvia, no signifique una amenaza.
Resulta importante que hagan un repaso de las zonas donde el agua encuentra una corriente natural y que no haya áreas que la obstruyan para así evitar riesgos de inundaciones.
Sí, parece que se avecina una tarea titánica para las autoridades pero también son acciones que se deben mantener de manera continua para que las aguas y los vientos no se conviertan en un peligro.
Y en esta tarea, una responsabilidad compartida será la de contar con información suficiente para que autoridades y población sepan qué acciones se deben emprender en caso de que haya una amenaza inminente.
De parte de la población debe quedar claro, con la información disponible, que no hay riesgos que valgan la pena para resguardar su integridad y su vida ante la amenaza que suele representar la aproximación de un fenómeno hidrometeorológico.
Seguro para el caso de Sinaloa aún faltan semanas para que las amenazas se hagan más frecuentes, pero mientras eso llega, hay tiempo para reforzar todas las medidas preventivas para evitar que alguien se ponga en riesgo. Y hay que actuar.