JANNETH ALDECOA/ JOSÉ ALFREDO BELTRÁN
La "Generación 51" de egresados de la Escuela Superior de Agricultura (hoy desaparecida) Hermanos Escobar de Ciudad Juárez, Chihuahua, en su anhelo de estar en contacto fraternal con quienes son sus condiscípulos y haber celebrado sus reuniones anuales por todos los rincones de la República Mexicana, desde el año de 1971, este año ha escogido la ciudad de Ensenada, Baja california, del 27 al 31 de agosto para convivir en compañía de sus familiares y amigos.
Sin duda será una auténtica reunión en uno de los lugares con muchos atractivos como ahora se describe:
El puerto y ciudad de Ensenada, famosa y atractiva por su belleza, producción pesquera y vitivinícola le da a ese rincón nacional una importancia particular y una atracción única; tanto que en poco tiempo pasó de ser una empacadora de mariscos a una verdadera potencia económica.
Ensenada es conocida como la "Cenicienta del Pacífico", se encuentra a 109 kilómetros al sur de la línea internacional que separa a Tijuana, Baja California con Estados Unidos. Su clima cálido mediterráneo, la atmósfera agradable y la accesibilidad por tierra, aire y mar han hecho de Ensenada un destino predilecto para el turismo en cualquier temporada del año.
Situada en la preciosa Bahía de Todos Santos, Ensenada cuenta con una gastronomía internacional incomparable, incluyendo uno de los mejores mariscos de la región, pescado fresco, langosta y abulón son una de sus especialidades; así como auténticos platillos mexicanos, preparados con recetas tradicionales.
Estos deliciosos platillos están complementados por exquisitos vinos locales de fama internacional que se producen con uvas de los Valles de Guadalupe, San Antonio de las Minas y Santo Tomás.
El clima cálido de Ensenada ofrece numerosas actividades para la recreación en el transcurso del año; Golf, Tenis y excursionismo, carreras de autos, entre ellas las internacionalmente famosas "Baja 1000" (noviembre) y "Baja 500" (junio), bicicleta y equitación, así como el Surf, veleo, pesca deportiva, kayac, ski acuático y buceo.
Ensenada es el puerto más importante de Baja California y el segundo de México más visitado por cruceros y yates turísticos. Se impone visitar el centro social cívico y cultural "Riviera del Pacifico", que en los años treinta fue un hotel casino de lujo.
Representa este lugar un hito del pasado, del presente y proyectos del futuro, de la ciencia y la historia. Hay que conocer "Tara", estatua exótica que representa a la madre naturaleza. Se antoja visitar en el "Hussongs", la cantina más antigua de las Californias, en dónde se encuentran las "Bodegas Santo Tomás", la vitivinícola más antigua del estado, recorrer los viñedos en los pintorescos valles de: Guadalupe, San Antonio de las minas y de Santo Tomás, los cuales se encuentran en la franja mundial del vino.
Entre las maravillas naturales que ofrece Ensenada a los visitantes está La Bufadora, oquedad en un cerro a la orilla del mar que con el golpeteo de las olas produce un constante sonido ronco con escapes de agua del mar en forma de vapor que se eleva a 30 metros de altura.
El paseo por el malecón de Ensenada, es propio para enamorados y turistas. A lo largo del recorrido los paseantes se deleitan con el vuelo suave y flotante de las gaviotas y pelícanos, con el juego de coqueteo de los lobos marinos en el agua o sobre las rocas.
Disfrutar de un atardecer en el amplio jardín de la inmensa llanura del mar, visitar también el asta bandera monumental, como también el mercado de mariscos más grande de Baja California y saborear el tradicional taco de pescado, creación original de Ensenada.
Así mismo es muy importante recorrer la calle Primera dónde se encuentra una gran variedad de tiendas de artesanías, restaurantes y bares a lo largo de nueve cuadras llenas de folclor, propio e internacional. Encontrarán también tiendas de artes finas, joyería, ropa y artículos de piel mexicana, artesanías de indígenas de la región, así como artículos de importación de diversos países.
Ya fuera de la ciudad, hay que seguir la ruta del vino, ubicada en la parte norte del estado de Baja California. La región goza del clima mediterráneo ideal para el cultivo de la vid. Hay pocos microclimas en México que combinan extraordinariamente esas características únicas de altitud, tierra, temporadas, tiempos y temperaturas, sin olvidar el amor y la destreza para elaborar ricos vinos.
Los Valles de Calafia, Guadalupe y San Antonio de las Minas, son el corazón de la ruta del vino, que se extiende también hacia el norte del Valle de las Palmas y hacia el sur a los Valles de Santo Tomás y San Vicente Ferrer.
Los vinos blancos bajacalifornianos son elaborados a partir de uvas Chenin Blanc, Colombard, Sauvignón Blanc y Chardonay, mientras los tintos utilizan típicamente uvas Cabernet Sauvignón, Merlot, Cabernet, Franc, Granache, Carignane, Barbera, Nebbiolo y Zinfandel.
Entre los viñedos y vinícolas existentes en la ruta del vino se encuentran, entre otras:
L.A. CETTO Valle de Guadalupe, una de las de mayor renombre y tradición, que ofrece además de sus viñedos, jardines, sala de degustación, tours y una boutique.
Vides de Guadalupe Domecq, ofrece además de sus viñedos, sala de degustación, áreas de picnic y tienda.
Viña de Licéaga, viñedos y vinícola familiar que ofrece, degustación de vinos en la cava y terraza.
Casa de Piedra, viñedos y una singular vinícola construida en piedra albergan a este pequeño y celebrado productor. Ofrece degustación de vinos, tours guiados, y el famoso curso de vitivinicultura.
La ruta del vino ofrece una gama amplia de atracciones que van desde las más pequeñas vinícolas familiares, hasta los productores a gran escala.
Así mismo se pueden encontrar pequeños restaurantes campestres familiares hasta las más finas mesas; sin olvidar sitios para acampar, ranchos, centros artesanales, museos, hoteles, boutiques, cultura indígena y sitios naturales. La ruta del vino es el destino ideal para vacacionar en pareja o con toda la familia.
