César Peña Sánchez/ APRO
El candidato del PRI a la gubernatura de Tamaulipas, Rodolfo Torre Cantú, resultó muerto en una balacera registrada la mañana del lunes 28 de junio en el municipio de Soto La Marina. El estado de Tamaulipas se ha significado por la efervescencia de distintos grupos de la mafia.
Esto no es nada nuevo, desde la época del Gobernador de aquella entidad, Tomás Yarrington Ruvalcaba, ya era un estado problema por su gran cantidad de asesinatos a manos de los narcotraficantes.
Tal que el territorio que adoptó al llamado grupo de "Los Zetas", quienes primeramente protegieron a Osiel Cárdenas y sus socios. Preso y deportado éste se formalizaron distintas pandillas que lo tomaron como territorio de arbitrariedades, por la gran cantidad de asesinatos que ahí se efectuaban en buen número todos los días. Durante la gubernatura de Tomás Yarrington se habló muchísimo de que este Gobernador estaba dentro de la mafia; sin embargo, terminó su periodo de Gobierno.
El asesinato de Rodolfo Torre Cantú es el enésimo que ocurre en aquella entidad federativa; durante la desigual lucha han caído hombres, mujeres y niños de distinta edad, oficio y categorías. Pero desde luego, se dan a conocer con mayor resonancia y celeridad cuando se trata de un asesinato de políticos. En lo que va de la lucha antidrogas han sido varios. Hace pocos días asesinaron en Valle Hermoso al candidato del PAN a la presidencia municipal y a su hijo.
Mario Guajardo Varela, quien era el candidato del PAN a la presidencia municipal de Valle Hermoso, fue asesinado aquella mañana junto a su hijo y uno de sus trabajadores en el interior de las oficinas de una empresa agrícola de su propiedad. De acuerdo a la versión de las autoridades, alrededor de las 9:00 horas de aquel aciago día un hombre que aún no ha sido identificado por que logró darse a la fuga, ingresó a las oficinas de Proveedor Agrícola Guajardo, ubicadas en kilómetro 120 con kilómetro 83 de la carretera las Yescas.
En ese lugar preguntó el desconocido por Guajardo Varela, quien se encontraba acompañado por su hijo Luis Mario Guajardo Adame y un trabajador que no ha sido identificado. Al encontrarse con estas personas, el desconocido abrió fuego contra los 3 dejándolos muertos en el lugar. Hasta estos momentos no se ha determinado si el asesino utilizó una pistola o una metralleta. Al lugar acudieron autoridades policiacas realizando las primeras investigaciones.
De la muerte de Mario Guajardo Varela, candidato del PAN a la presidencia municipal de Valle Hermoso, de su hijo Mario Guajardo Adame, así como el de uno de sus colaboradores de nombre Fernando Treviño no hubo gran aspaviento, sino que el Gobierno federal reiteró su compromiso de seguir combatiendo al crimen organizado para construir el México seguro que todos los mexicanos de bien desean.
Antes, el 13 de mayo, ante el IFE el gobernante Partido Acción Nacional, PAN, pidió la intervención de las fuerzas federales para garantizar la seguridad de sus candidatos ante las elecciones del próximo 4 de julio, tras el asesinato del hoy aspirante a Alcalde de Mario Guajardo Varela. Por su parte el Secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, de gira por Baja California, noroeste del País, condenó el crimen y señaló que "es una agresión que nos lastima a todos los mexicanos".
Todas las muertes de cualquier persona ocupan y preocupan y cuando son asesinatos como que se nos calienta la sangre aunque cualquier mexicano que fallezca en forma atropellada debe ser objeto de una consideración muy especial y un lamento muy cristiano, así sea el rango que ocupe en la escala de la política. En el caso del lamentable asesinato del candidato a Gobernador del estado de Tamaulipas, Rodolfo Torre Cantú, en una balacera registrada el lunes 28 de junio por la mañana, nos cayó a todos como cubeta de agua helada.
En esta ocasión no nos interesó el partido que profesaba ni siquiera el que lo había elegido como candidato a la gubernatura de aquel estado, simplemente llega a nuestra mente la ya tradicional reflexión de que las cosas, en México, no deberían seguir así.
No porque se tratara de un candidato al Gobierno de un estado sino por la forma tan aviesa de llevar a cabo la ejecución del candidato y sus acompañantes. Fue una emboscada que cumplió los tristes éxitos de quien o quienes la planearon, pero si la visión abarca la lamentable postura de la presidenta del PRI Beatriz Paredes Rangel no es muy adecuada su postura cuando se dice que no hay que lucrar con el dolor ajeno, es una manifestación de duelo que todos estamos obligados a cumplir, pero si a raíz de los trágicos hechos se pasa a la ofensa, al encono y a la especulación política, esto significa que profanamos la memoria de los caídos.
Beatriz Paredes Rangel, rápidamente pidió la cabeza de César Nava y el fin a la alianza con el PRD para restablecer el diálogo; acusó al presidente de lucrar con la tragedia de Tamaulipas, y reclamó respeto y una investigación verdadera. Doña Beatriz ella sí que esta sacando raja política del árbol caído, pues si dentro de sus supuestos lloriqueos pide acondicionantes políticos para favorecer a su partido y a los suyos desvirtúa todo lo que de positivo puedan tener sus palabras.
En respuesta al ofrecimiento presidencial de "unidad", el PRI pintó su raya ante el Presidente Calderón al que acusó de estar lejos de la responsabilidad y civilidad para que el presidente le reclamara al PRI, ya que con la guerra sucia y un interlocutor político que recurre a todo por la victoria, estimula una división que es caldo de cultivo del crimen.
Doña Beatriz ve peligros en otras gentes pero no en su persona ni en los suyos. Tenemos que recordarle a la respetable señora Paredes que en esta ocasión de las campañas políticas como en otros tiempos, su partido ha sido campeón de la tranza y el chanchullo, el que hoy quiere ocultar con el signo de una hipócrita postura.
Doña Beatriz Paredes, según ella rompe con el Gobierno de Felipe Calderón porque no acepta el diálogo propuesta por el Presidente; porque acusa al Gobierno federal de lucrar políticamente con el crimen del candidato del PRI en Tamaulipas; porque para restablecer el diálogo pide la cabeza de César Nava, si señor ese panista que ha dado a luz las charlas mafiosas de Fidel Herrera, Gobernador de Veracruz y del candidato del PRI en Oaxaca. Porque le dice a Calderón que antes que discursos respete el duelo del PRI.
Lo que doña Beatriz hace y deshace se lo indilga a otro y por lo tanto jamás quiere reconocer que el PRI ha sido el máximo destructor convertido en viles asesinatos de muchos mexicanos. Destruyeron a Luis Donaldo Colosio Murrieta y de esto sabe el abc el Senador Manlio Fabio Beltrones. El PRI mató a su secretario general Ruiz Massiu e hizo desaparecer a Manuel Muñoz.
Doña Beatriz dice que pone en primera fila el reclamo de su solidaridad cuando vea una investigación ágil y certera. Por ejemplo como la que ocurrió cuando asesinaron a Luis Donaldo Colosio, a Ruiz Massiu y la desaparición de Manuel Muñoz. La presidenta del PRI le dice al Presidente que la civilidad y la cordura del PRI hicieron posible la instauración del régimen.
En parte tiene razón pero es que al PRI y a sus personajes no les quedaba otro camino porque sus pleitos más ásperos han sido con la desbandada del PRI que formalizó el PRD.
Usted amigo lector, juzgará la dictadura de la señora Paredes Rangel, pues desde que se conoció no ha dejado de vivir del erario. Escala la posición de Gobernador en un estado y se sigue de frente escalando o caminando para atrás como los cangrejos, pero siempre de la mano del erario. Finalmente para qué reniega con el Gobierno Federal teniendo tan cerca a su Gobernador de Tamaulipas Eugenio Hernández Flores, quien debe velar por lo que pase en Tamaulipas.
