1. Una de las necesidades básicas del ser humano es el descanso. Éste se puede manifestar a través de un día libre, de vacaciones periódicas o del deporte, actividad lúdica, ejercicio físico intenso, entretenimiento, que nos debe servir para dos cosas: desarrollar nuestra creatividad, descansar haciendo adobes, y cargarnos de energías al alejarnos de las actividades cotidianas, para volver a ellas con renovados bríos.
2. Sin embargo, no siempre el deporte sirve para el desarrollo de esa creatividad y la restauración de las propias energías. Con frecuencia, y en especial cuando no se practica, el deporte propicia el embrutecimiento de las personas a través de las drogas o el alcohol, pero también porque fomenta el desinterés en los problemas sociales, sobre todo cuando pasamos horas frente a la televisión en este mes del mundial de futbol.
3. Y es que mientras debatimos en conversaciones con familiares, amistades y compañer@s de trabajo sobre el desempeño de nuestra selección en Sudáfrica, el Golfo de México sigue presentando una de las mayores catástrofes económicas y ecológicas en la historia de la humanidad, las gasolinas han vuelto a aumentar su precio, y nosotr@s... preocupad@s por pasar a la siguiente ronda en el mundial.
4. La situación política del país es nada alentadora. En medio del vacío que cada vez crece surgen propuestas como Iniciativa México, en la que los medios de comunicación electrónicos se erigen como los actores más importantes de la vida política nacional, esos medios que sí transmiten los partidos de la selección pero que se hicieron a un lado en la información sobre el secuestro de Diego Fernández de Cevallos.
5. En este último año el representativo nacional jugó decenas de partidos, todos ofrecidos puntualmente por las televisoras, mientras ha pasado también un año del incendio en la guardería ABC de Hermosillo, Sonora, en la que perdieron la vida 49 niñ@s, y 104 quedaron lesionad@s. Un año de juegos por la tele, y de lamentos por la muerte de esos infantes, pero sin encontrar y castigar a los responsables de esa tragedia.
6. Y mientras la selección se prepara para seguir con vida en el mundial, derrotando a Francia, continúan las pérdidas de vidas humanas en nuestro país, muchas de ellas jóvenes, que caen acribilladas por las balas de una delincuencia cada vez más organizada, más feroz, más impune, más segura de la protección que le brindan las policías. La vida del representativo nacional parece más importante que la de es@s muchach@s.
7. Ojalá y el equipo mexicano haga un buen papel en el mundial de Sudáfrica.
Pero si ese desempeño nos aleja de nuestros compromisos sociales, si sirve como alienación y no como descanso momentáneo de las fatigas diarias, si nos distrae en vez de sólo divertirnos, si nos embrutece y no nos enaltece, estaremos, una vez más, ante una cortina de humo que sigue ocultando los graves problemas de nuestro País.
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