"Fox da línea a los diputados blanquiazules para proseguir, hasta sus últimas consecuencias, el juicio de desafuero contra AMLO"
Dantiela Mendoza/ Héctor Castro
El Presidente Fox cedió terreno a la polarización política del país cuando virtualmente exhortó a los diputados panistas, en Cuernavaca, Morelos (18/08/004), a que voten por el desafuero del Jefe de Gobierno del DF, Andrés Manuel López Obrador. Sin esperar siquiera a que la Sección Instructora de la Cámara de Diputados concluya el periodo de desahogo de pruebas y establezca si hay consistencia jurídica suficiente para ser llevada al pleno cameral la solicitud de desafuero presentada por la PGR. ¿Es, sin embargo, el desafuero del Jefe de Gobierno el parteaguas que el país necesita para purificar su vida pública y salvaguardar el orden constitucional? ¿No hay, acaso, decenas de peces gordos beneficiarios de la impunidad con el trasiego de cacahuates por lingotes de oro (Barrio dixit)? El titular del Ejecutivo expresó tajante: Para la vida política nacional es de gran trascendencia que nos mantengamos firmes en la defensa del Estado de derecho. Tenemos la oportunidad de sentar precedente para que ningún gobernante vuelva a intentar ponerse por encima de la ley. Y con obvio sesgo proselitista, remarcó: ¡Este logro (el desafuero de AMLO) será un punto a favor de Acción Nacional!. Asumiéndose de hecho como líder nato de su partido, Vicente Fox no rehuyó dar línea desde el Olimpo Presidencial a los diputados blanquiazules para proseguir, hasta sus últimas consecuencias, el juicio de desafuero contra AMLO. Fox no escatimó el tono falsamente dramático, habitual en la cultura del presidencialismo. Donde la nación cierra filas con su Presidente si éste toca sus fibras sensibles, y marca la única ruta (éticamente) posible. No obstante lo azaroso del camino. Enfrentaremos grandes presiones y seguramente habrá agresiones muy fuertes. Nada debe estar por encima de nuestras convicciones de sostener muy alto la lucha por la legalidad que iniciaron nuestros fundadores. Advirtió el Presidente, arengando a sus diputados para infundirles ánimo (valor) antes de la batalla legislativa cuyo fin es despojar a López Obrador de su fuero constitucional. Al proceder así en un asunto tan delicado hoy en manos del Poder Legislativo, pero también de la SCJN, Vicente Fox cometió un grave error político, y aun jurídico, en tanto asumió sin tapujos como una causa de su Gobierno y el PAN la caída del Jefe de Gobierno. Dando así sobrada razón a quienes ven en la conducta del Presidente un atropello a su principal rival político para excluirlo de los comicios presidenciales de 2006. Y credibilidad adicional al texto de renuncia de Alfonso Durazo como Secretario de Comunicación Social de la Presidencia, vocero presidencial y secretario particular del Presidente, donde critica la intención del Presidente Fox para intervenir en el proceso sucesorio, apoyándose en la inercia superviviente del priato. Aun para favorecer a su esposa Marta Sahagún. El Presidente Fox exhibe con más frecuencia el blanco tropical de sus ataques. Como lo muestra su avidez (futurista) en minimizar la importancia de las grandes obras de vialidad en el DF frente a la obra pública que en diversas entidades los gobiernos locales y el Gobierno federal llevan a cabo. Esa conducta está siendo percibida como una obcecación que le resta legitimidad al Presidente Fox. Haciéndolo descender a la lucha política en el llano para intervenir en la refriega y asestar, con su majestad presidencial, continuos golpes a sus oponentes y dirigir contra objetivos selectos la fuerza de su artillería legislativa. Acaso el Presidente está convencido que para contrarrestar la popularidad de AMLO debe caricaturizar su obra pública, haciendo comentarios despectivos contra los distribuidores viales y segundos pisos del periférico en cualquier oportunidad que se le presente para ello. Sugiriendo que la obra pública del DF es de relumbrón (Ayer AMLO inauguró la primera etapa del segundo piso del periférico, que va de Las Flores a San Antonio, sin la presencia del Presidente Fox, quien adujo razones de agenda para no asistir. Contó, en cambio, con la asistencia de connotados empresarios, la jerarquía católica, el mundo académico y luchadoras sociales como Rosario Ibarra de Piedra. Fox no pierde tampoco oportunidad para denostar la política social del Gobierno del DF, refiriéndose implícitamente a ella como paternalista y populista al dar sólo dádivas a los pobres. A la par de esa descalificación de la obra pública y social de AMLO (quien, sin embargo, retribuye criticando la política económica neoliberal del foxipanismo), Fox ha mantenido una presión en ascenso para desaforar al Jefe de Gobierno y consignarlo ante un Juez. Buscando así que AMLO radicalice su discurso y aun pierda compostura contra replicando con exabruptos (lo cual no ha sucedido) La apuesta en Los Pinos y la plana mayor madracista es que, separado del cargo, El Peje pierda buena parte de su magia política y se desplome en las encuestas. Sin descartar, desde luego, el factor coadyuvante de una división en el PRD. Bajo esa lógica se inscribe también el discurso del Presidente Fox en la ceremonia masiva que la SEP organizó en la Sala de Armas de la Magdalena Mixhuca (20/08/004). Donde distribuyó becas, cheques y libros de texto gratuito, siendo vitoreado por cinco mil estudiantes de preescolar, primaria y secundaria. Quienes entonaron constantes porras al Primer Mandatario. Ahí el Presidente Fox reivindicó como un logro del Gobierno federal los avances en el sistema educativo de la capital del país (en especial fue motivo de celebración la cobertura universal de la enseñanza preescolar) que tiene el liderazgo en prácticamente todos los indicadores. Por cuanto en el DF la carga principal de la inversión educativa recae todavía en la Federación. Como si el actual Gobierno de AMLO tuviese responsabilidad en la confección de una Ley General de Educación en que la transferencia de los servicios educativos al Gobierno del DF se supeditan a un acuerdo (político) con el sindicato. Como conviene al feudo sindical que Elba Esther Gordillo representa. No pasó desapercibido que el nuevo machucón del Presidente contra AMLO, ocurrió dos días después de que el Gobierno capitalino entregara un millón 375 967 vales para canjearse en tiendas Gigante por paquetes de útiles escolares para estudiantes de los niveles pre escolar, primaria y secundaria de la capital. En tanto el foxipanismo pretende desaforar a AMLO para que ningún gobernante ose querer situarse por encima de la ley, algo y (o) alguien convenció a Lino Korrodi, en conjunción con Ignacio Creel Cobián, Carlos Rojas Magnon y María de la Luz Ruiz para que se retractara de sus declaraciones a un medio de comunicación donde sostiene haber entregado a la campaña de Santiago Creel en 2000, 5 millones de pesos a través del Fideicomiso para el Desarrollo y la Democracia en México. Así,súbitamente, después de varios meses de silencio, las personas mencionadas se dignaron dirigirse al instituto, entregando a destiempo cinco documentos con el objetivo de que el Consejo General del IEDF aplazara la discusión sobre el proyecto de dictamen de la Comisión de Fiscalización del instituto. La cual determinó que Santiago Creel rebasó los topes de campaña por 2.1 millones de pesos. Ello podría significar una multa al PAN. Pero, al estar tipificado en el DF como delito rebasar el tope de campaña, la Procuraduría capitalina podría iniciar la averiguación previa correspondiente. No es para menos el sobresalto en Bucareli. dmartinmbara@hotmail.com