Sugey Estrada/Hugo Gómez
En el mundo posmoderno existe un individualismo craso en el que rigen el hedonismo, una cultura del gozo privado, la supremacía de la imagen sobre la palabra y la moda ocupa un lugar preponderante, alertó Gilles Lipovetsky durante la conferencia "Desafíos del individualismo contemporáneo: vida pública y privada", organizada por el Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República.
De acuerdo a varias notas periodísticas, Lipovetsky señaló que el individualismo contemporáneo presenta rasgos muy preocupantes, comenzando por el culto hedonista. "Se manifiesta mediante la increíble expansión de la sociedad de consumo, de híperconsumo, una sociedad que siempre y cualquier momento de la vida alaba el gozo material, la diversión, el ocio".
Otro rasgo es el neonarcisismo del culto al cuerpo. "Se trata de la amplia democratización del deporte, del desarrollo de las tecnologías del mejor estar, del mejor sentir, sauna, masajes, salas de fitness, yoga, relajación. Se democratizaron mucho los productos cosméticos, los cuidados cosméticos, la cirugía estética", afirmó.
El culto sicológico también ha transformado la cultura educativa, al pasar de un modelo educativo autoritario a uno de escucha, permisividad, autonomía y ausencia de autoridad. "Hoy día", precisó, "los padres no se obsesionan por ser obedecidos sino por la felicidad de sus hijos".
Además, expresó, en estas sociedades se da la búsqueda de goce sicológico; la gente necesita hablar y ser escuchada, de ahí la proliferación de sicoterapias y sitios como Facebook.
Apuntó que el derrumbe de las grandes ideologías es otro rasgo que provoca que ya no se quiera sacrificar el presente por el futuro, sino disfrutar el ahora.
Agregó que la falta de confianza en la clase política ha aumentado la democracia de rechazo, con ciudadanos que ya no votan por las ideas, sino en contra de un grupo.
¿Me absorbe el contemporáneo individualismo?
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