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"Reprobados en honestidad"

"La corrupción es uno de los obstáculos más importantes para el crecimiento de nuestra economía."

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21/10/2005 00:00

    Demetrio Sodi de la Tijera*

    Es indignante ver el nombre de México entre los países más corruptos del mundo. En escala de uno a 10, en donde esta última cifra es un reconocimiento a la honestidad del gobierno, nuestro país obtiene apenas 3.6 puntos, o sea, salimos no solo reprobados, sino con una calificación vergonzosa. Lo mismo sucede con la mayoría de los países latinoamericanos, salvo Chile, el resto padecemos el mismo cáncer de la corrupción.
    Diversas publicaciones señalan que la corrupción es uno de los principales obstáculos a la competitividad, ya que aleja las inversiones y encarece los productos. Este mal es, según varios analistas, una de las causas por las que los países latinoamericanos no se desarrollan.
    La corrupción es uno de los obstáculos más importantes para el crecimiento de nuestra economía, la creación de empleos y el combate a la desigualdad y la pobreza. La corrupción aleja la inversión y encarece los productos finales.
    La corrupción afecta mas a los que menos tienen tanto por el impacto en los precios y el empleo como porque al no poder pagarla limita sus oportunidades con relación a otros grupos económicos. La corrupción hace ineficiente al gobierno, provoca el desorden y deja impune la violación a la ley.
    El Gobierno mexicano y los políticos tenemos fama de corruptos y la gente nos tasa a igual a todos sin importar el comportamiento personal de cada quien. La corrupción es la principal razón de la pésima imagen que tiene la clase política del país. La mala fama no es gratuita en mi experiencia política de 30 años son pocos los políticos y los funcionarios 100 por ciento honestos que conozco.
    En los últimos años ha habido avances en el Gobierno federal en el combate a la corrupción pero se ha retrocedido a nivel de los gobiernos estatales y municipales. La gran cantidad de recursos que se han descentralizado a las entidades federativas han provocado niveles de corrupción nunca vistos.
    La falta de transparencia y autonomía de las contralorías, el Congreso, las contadurías mayores de Hacienda, las procuradurías y en muchos casos del Poder Judicial han permitido la impunidad de los gobernantes y junto con ello el aumento de la corrupción. La impunidad es el principal incentivo a la corrupción.
    En el país varias entidades federativas son ejemplo de la desmedida corrupción que existe, destacando según "Transparencia mexicana" Puebla, el DF y el Estado de México que ocupan los lugares 32, 31 y 30 en canto a honestidad del gobierno. Contrastan con estados que han logrado combatir con éxito la corrupción como: Baja California sur, Quintana Roo y Colima. Es de preocupar que en las dos entidades federativas con mayor población y desarrollo económico sean sus gobiernos los más corruptos del país.
    En el caso del DF, la situación es crítica y en los últimos años en lugar de avanzar hemos ido para atrás. El desorden y la corrupción de los últimos cuatro años provocada por diversos grupos del PRD que se han apoderado del gobierno central y las delegaciones han ahuyentado la inversión y limitado el crecimiento económico y del empleo.
    La economía de la ciudad es poco competitiva y como resultado ha crecido a  un ritmo menor que la del país en los últimos 20 años. Mientras que la economía mexicana creció en promedio 3 por ciento la del DF lo hizo sólo en 2 por ciento. El DF es la entidad federativa con el mayor índice de desempleo y su falta de crecimiento económico es una de las razones de que el país no crezca al ritmo que debería.
    Habría que preguntarnos si es posible que el país crezca al 7 por ciento si la economía del DF, que representa el 22 por ciento del PIB, esta en crisis y es poco competitiva. Habría que preguntarnos si es posible que la economía del DF pueda desarrollarse con la corrupción, el desorden y la violación a la ley que existe.
    Lo que hemos vivido en los últimos años en la asignación de contratos y construcción de obras sin concursos es escandaloso. Nunca en la historia de la ciudad había habido tanta falta de transparencia y violación a la ley.
    Nadie sabe cuanto costó el 2º piso, a que precios se canjearon terrenos propiedad del gobierno por los puentes de los poetas, de donde se sacaron los recursos para completar la obra, quien aprobó que se redujeran recursos al Metro y al sistema de agua y drenaje. La falta de transparencia en el Gobierno capitalino provoca la corrupción y la impunidad.
    Cuando nadie tiene la información suficiente para controlar y fiscalizar al gobierno y a los funcionarios la corrupción se extiende sin límite. Ahí esta la razón de la oposición de López Obrador a dar autonomía e integrar el Consejo de Transparencia, la discrecionalidad con que su gobierno manejo el presupuesto y la asignación de obras no aguantaba una institución realmente independiente.
    Cuando falta transparencia se provoca la transa, esa es la historia de los gobiernos priistas. Durante 70 años el gobierno cerró la información y protegió la corrupción de sus funcionarios. Es lo mismo que hizo durante su gestión en el Gobierno capitalino López Obrador, protegió a funcionarios con oscuros historiales y les garantizo la impunidad.
    El DF no puede seguir como está, se requiere urgentemente un cambio. El futuro del país depende en mucho de lo que pase en la capital del país. La ciudad es el centro entre el norte y el sur, entre el país desarrollado y el olvidado. Es el espacio para mantener la unidad del país y no puede ser el lugar con mayor desorden, violación a la ley y corrupción.
    Que tristeza que nos distingamos como país por ser uno de los mayores índices de corrupción del mundo. Que lástima que reprobemos con 3.6 en honestidad. Que lástima que en lugar de avanzar vayamos para atrás y que lástima, como capitalino y mexicano, que el DF, el centro de la vida política, cultural, educativa, religiosa, económica y social del país sea la segunda de las entidades federativas más corruptas.


    *Senador de la República
    tuopinion@demetriosodi.org.mx