JESÚS LÓPEZ / MAGDALENA RODRÍGUEZ
Dentro de los festejos del Bicentenario de la Independencia de México y del Centenario de la Revolución Mexicana se pensó en la construcción de un monumento que recordara ambas fechas y que se constituyera en un símbolo representativo y reconocido por el pueblo y en cuya plaza los ciudadanos acudieran a descansar y pasear con sus familias, como lo hacen en los actuales monumentos a la Independencia y a la Revolución.
Sin embargo, las características, costo y retrasos de la obra la fueron marcando por los medios de comunicación y por los adversarios políticos del régimen del Presidente Felipe Calderón Hinojosa, como una obra inadecuada e irrelevante, dada la importancia de las fechas y los festejos conmemorativos.
Sin conocimiento completo y evaluación correcta de las circunstancias, se criticó y se anatematizó el monumento a tal grado que parte del pueblo de México terminó por rechazarlo y fue tomado como pretexto por varias organizaciones sociales antagónicas al régimen, para sus marchas, plantones, protestas, pintas y manifestaciones de todo tipo.
Ante todo esto, conviene insistir en informar sobre aquellos factores que explican muchas de las circunstancias que dieron pie a las críticas contra el Presidente de la República y su Gabinete, en referencia a la construcción de la Estela de Luz.
En primer lugar, todo el costo, no sólo del monumento, sino de todas las obras y festejos del Bicentenario, se realizó dentro de presupuestos acordados y autorizados por la Cámara de Diputados desde el año 2006 hasta el 2009, quedando el uso y aplicación de esos recursos a cargo de un Fideicomiso en el que fungieron como fideicomitente la SHCP y como fiduciario inicial el Bancomext, SNC y posteriormente el Banjército, SNC.
El Fideicomiso instituyó un Comité Técnico con representantes de la Secretaría de la Función Pública, de Hacienda, de Relaciones Exteriores, de Educación Pública y del INEHRM, como organizador de los festejos.
En su informe final, el Banjército reportó un monto ejercido en todos los festejos y obras por 3,834 millones de pesos con un remanente de 106 millones que se regresaron a Hacienda una vez finiquitado el fideicomiso.
Segundo: sobre las críticas al tipo y naturaleza arquitectónica del monumento. Se convocó a un jurado integrado por arquitectos, ingenieros, urbanistas y artistas plásticos para que seleccionaran al que consideraran el mejor proyecto, dentro de más de 25 presentados, algunos de ellos verdaderamente originales, atractivos y significativos. Pues bien, éste jurado de expertos en arquitectura histórica seleccionó el monumento "Estela de Luz" presentado por el Arq. César Pérez Becerril, a quien se le cubrieron poco más de 18 millones de pesos por su proyecto, que por cierto estaba incompleto, pues no cubría o cubría con deficiencias problemas técnicos como cimentación adecuada, sistemas antisísmicos y de túnel de viento, así como un incorrecto cálculo de la aleación y resistencia de la estructura del acero.
Tercero: respecto a los incrementos en el costo se debe aclarar que el contrato inicial para la construcción del monumento fue por 393.5 millones de pesos, pero una vez agregados los costos de la cimentación que pasó de 25 mts. de profundidad a 50 mts., así como las nuevas especificaciones en la aleación del acero y la resistencia del mismo a lo cual se agregaron los costos del sistema antisismo (que por cierto es totalmente computarizado y lo último en tecnología) y los refuerzos necesarios para resistir vientos hasta de 140 kms. por hora que se han presentado en esa zona y a esa altura, motivaron que la obra finalmente costara alrededor de 1,187 millones de pesos, según el último informe de Banjército al 30 de noviembre de 2012.
La Secretaría de la Función Pública suspendió e inhabilitó a cuatro funcionarios de la Empresa III Servicios S.A. de C.V. y levantó 14 observaciones a funcionarios de dicha Empresa y del INEHRM, por diferentes irregularidades administrativas, que fueron confirmadas y también sancionadas por la Auditoría Superior de la Federación.
El monumento está totalmente terminado, tal vez no fue el mejor, pero finalmente fue seleccionado por expertos reconocidos de la Ciudad de México, controlada su construcción por un Comité Técnico del Fideicomiso y existe un estudio técnico de la UNAM que corrobora que las soluciones técnicas y arquitectónicas fueron las correctas dada la naturaleza del suelo y la altura y esbeltez de la Estela de Luz.