De acuerdo con un estudio elaborado por los gobiernos de México y Estados Unidos, el narcotráfico en Estados Unidos deja a los cárteles de la droga mexicanos entre 19 mil millones y 27 mil millones de dólares anuales.
"Cierta información obtenida indica que no más de la mitad del dinero llega a las entidades financieras por conducto de las organizaciones criminales; otra información indica que es un cuarto del numerario", dijo John Morton, Secretario adjunto para Investigación de Migración y Aduanas, en conferencia de prensa efectuada la Ciudad de México el miércoles anterior.
De acuerdo con esos datos en México se lavan, al año, entre 4 mil 700 millones y 14.5 mil millones de dólares y Sinaloa es uno de los principales eslabones en la cadena de blanqueo, porque Culiacán es una de las tres ciudades de destino de las millonarias remesas ilegales, las otras dos son Guadalajara y Monterrey; mientras que los aeropuertos internacionales de Guadalajara, Distrito Federal y Cancún son utilizados para envío de dinero sucio a Panamá, Venezuela y Colombia.
Los resultados que arroja este estudio indican que no hay datos precisos sobre la cantidad de dinero que se lava en el sistema financiero nacional y sobre la forma en la que operan en México las redes económicas del crimen organizado.
Sin embargo, Morton dijo que la investigación binacional sobre lavado de dinero es un gran paso para diseñar una estrategia conjunta dirigida a minar el poder financiero de las organizaciones criminales que operan en ambos lados de la frontera.
"El sólo arrestar personas no será la solución; tenemos que minar a las organizaciones, y para hacer eso tenemos que identificar e incautar sus ganancias", señaló Morton.
El propósito de combatir aquí y en el vecino país del norte el lavado de dinero responde a una vieja exigencia de la sociedad, porque, efecivamente, no basta con poner soldados y policías en las calles y la carreteras para combatir al narco, a éste hay que golpearlo donde más le duele: en sus bases financieras.
Lo que constata el estudio binacional es que en México no se ha combatido en forma sistemática el blanqueo de dinero sucio. Según el Diputado petista, Mario Di Constanzo, en los últimos tres años las autoridades mexicanas sólo han obtenido 20 sentencias condenatorias por este ilícito,
Hay analistas que dudan que se pueda trazar una estrategia contra el lavado de dinero si todavía no hay un diagnóstico y datos precisos sobre este fenómeno.
Se ha dado un paso adelante, es cierto, pero no es firme, hacen falta más pasos para avanzar y hacer un trabajo efectivo, de mayor alcance. Hace falta acosar a los narcos en el campo financiero.