Otra raya más a la pantera
Este martes Sinaloa vuelve a ser noticia nacional por una situación sumamente delicada y desafortunada: dos elementos de la Policía Municipal de El Fuerte enfrentan un proceso penal al ser acusados de ser actores intelectuales de la desaparición de una persona.
La víctima en cuestión es Nolberto Arturo Peña Carrillo, de 37 años de edad, con domicilio en Guadalupe y Calvo, y quien de acuerdo con sus familiares trabajaba en el negocio de venta de artículos de abarrote.
Nolberto cruzó a Sinaloa en septiembre de 2024 y desapareció a la altura de El Fuerte, ahora se acusa a dos elementos policiales de este acto.
La situación es crítica, pues además de enfrentar una crisis de seguridad la ciudadanía en Sinaloa debe lidiar con corporaciones policiales corruptas e infiltradas por criminales, criminales que se han formado ante las omisiones del Estado.
Cada vez se vuelve más fácil caer en la ilusión de que en Sinaloa se garantiza la seguridad, cuando quienes deben cuidarnos desaparecen personas.
La primera acción que le corresponde a la autoridad municipal de El Fuerte es la de destituir a los funcionarios incompetentes y omisos que pasaron por alto que dos elementos policiales desaparecieron a una persona, pues es increíble que los superiores de estos no sospecharan que se manejen en negocios turbios.
Y también se debe realizar una investigación en relación a los desaparecidos recientes de El Fuerte considerando la posibilidad de que los victimarios fueron policías, pues nada garantiza lo contrario.
El Gobernador Rubén Rocha Moya, en su calidad de máxima autoridad debe tener la capacidad para dar la cara de manera pública sobre este hecho y garantizar que se le dé cauce legal de manera expedita, pues cosas como esta son imposibles justificar o deslindarse de ellas.
Esperemos que la tan frecuente impunidad que vive Sinaloa no alcance a este caso y que sirva de lección a los policías del estado.
El chiste es salir a declarar
Sin tener muy claro el por qué, la facción parlamentaria de Morena en el Congreso del Estado ofreció un posicionamiento en torno a las negociaciones entre autoridades mexicanas y estadounidenses sobre el tema de los aranceles.
Entendemos que la expresión de respaldo a la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo resulta importante porque se hace como Poder Legislativo de un estado que exporta mucho, principalmente en alimentos.
Ciertamente, si lo que intentaron las diputadas María Teresa Guerra Ochoa, Sthefany Rea Reátiga y Eligio López Portillo era pronunciarse a nombre del Congreso, quizá lo más sensato era que el mensaje lo compartieran los líderes de todas las representaciones políticas, pero bueno, en Morena hay varios que deben justificar el sueldo de alguna manera.
Esto no es precisamente una novedad en la bancada de Morena, hace no mucho salió la mítica Diputada Nancy Yadira Santiago Marcos para explicar el proceso de inscribirse a la beca Rita Cetina. Como si eso justificara casi una década de intrascendencia.
Y personajes que gustaban mucho de salir a declarar, como Serapio Vargas Ramírez, pues ya recibieron su estate quieto con la llegada de Tere Guerra, a quien al parecer no le hizo mucha gracia aquello de denunciar invisibilización del Día del Hombre y mandó a Serapio a la congeladora pública... cosa que agradecemos antes de que quiera volver a quitarse la camisa en público.
A diferencia de lo que se hizo antier por el Ejecutivo, al menos las diputadas dieron espacio a que se hicieran algunas preguntas sobre el tema que abordaron.
Aún con todo eso, insistimos en que quizá era más prudente que la Junta de Coordinación Política, donde están las caras más visibles de cada partido, emitiera su posicionamiento sobre el asunto.
Las calabazas que se acomodan
Otro movimiento se registró ayer en la Universidad Autónoma de Sinaloa que da a entender cómo se está repartiendo el grupo que se rompió y ahora tiene, hasta donde entendemos, dos bandos a los que se deben unir.
En un 2025, después del Cuenato, como ya se le puede decir a la época en que perduró el cacicazgo del ex Rector de la UAS, y amigo personal de Ismael “El Mayo” Zambada, Héctor Melesio Cuén Ojeda, las calabazas se siguen acomodando, mientras la carreta avanza.
Primero se registró la ceremonia en la que se nombró a Robespierre Lizárraga Otero como dirigente estatal del Partido Sinaloense a la que no acudieron los funcionarios y acarreados de la UAS, porque, según nos confiaron, ya no hubo correo con las invitaciones obligatorias.
Peor, hoy se pudo observar cómo el nombre de Robespierre, luego de la mangoneada que le dieron en los procesos judiciales y pese a tanto pelear por la defensa de la autonomía universitaria, ya apareció para dar clases de derecho electoral.
Robespierre, del que ya podemos borrar de la lista del grupo Madueña e inscribirlo en el grupo de los Cuén Díaz, no volverá a ser funcionario de primer nivel, como lo fue desde su nombramiento como Director Jurídico o Abogado General de la casa rosalina.
Y a quien sí lo podemos borrar de la lista de los Cuén Díaz y ponerlo con Madueña es Alfonso Carlos Ontiveros Salas, quien rindió protesta ayer como Abogado General.
Ontiveros Salas en algún momento sí fue muy allegado a la familia Cuén, de hecho fue Secretario de Seguridad Pública del municipio, de donde salió corriendo.
Luego también lo chirrinearon de la UAS y gracias a que él no le da importancia a eso de que las chanclas que algunos tiran no las vuelven a levantar, pues él sí regresó a la Universidad.
Maestro de la verborrea o cantinfleo, chifleta, trinquete y especialista en maromas en el menor número de metros cuadrados, Ontiveros Salas entonces ya está en las filas de Madueña.
Ahora habrá que esperar para dónde se deciden sumar los otroras defensores de la autonomía, como Milton “Agripino” Ayala y el maestro del escape en horas de clase, José Ramón Bonilla.
Atentos, entonces, a ver cómo se acomodan las calabazas y en cuál carreta.