Ayer, en una reunión en la que participaron autoridades de Salud, de Turismo y Economía del Estado, el Gobierno Municipal y líderes de los sectores económicos de Mazatlán, se acordó una serie de acciones para que la ola de contagios por Covid-19 se detenga, sin necesidad de suspender acciones económicas.
El objetivo, sin embargo, es el de cuidar al máximo que se mantenga el orden.
Una hora más tarde, se realizó la Sesión Ordinaria de Cabildo Número 65, y el quinto punto del orden del día fue la propuesta de ampliación de horarios regulares de las licencias de alcoholes de negocios dedicados a la venta y consumo de bebidas alcohólicas en el municipio.
¡Y lo aprobaron! Es decir, que los negocios que así lo soliciten, podrán ampliar mantener sus puertas abiertas por dos horas más, algunos de ellos, hasta las 4:00 horas.
¡Así cómo se puede frenar la pandemia!
Entendemos que a ningún Gobierno le interesa dar malas noticias, es algo natural, pero la tercera ola de Covid-19 no es una noticia que se pueda ocultar, finalmente nuestros gobiernos han terminado por aceptar la pesadilla en que se nos ha convertido el aumento acelerado de contagios del virus.
Las autoridades van contrarreloj en la carrera contra el coronavirus, si sabían algo se tardaron para empezar las acciones contra él porque ahora por más que las medidas quieran ser rigurosas a lo mejor ya no les alcanza el tiempo para impedir el semáforo rojo, y lo que es peor, el contagio y muerte de más personas.
Desde el “ajuste” de cifras de Covid-19, el 28 de junio se disparó el número de pacientes activos, lo único que ha hecho Sinaloa es seguir subiendo en la espiral de contagios y las autoridades lo único que hacen es seguir repartiendo gel antibacterial a diestra y siniestra, y repetir incansablemente que las cosas están bien.
Tarde, pero al fin el Gobierno estatal y los gobiernos municipales en Sinaloa reaccionaron ante la tercera ola de contagios y anunciaron los primeros cierres, con la intención de contener el rebrote.
Las medidas que propusieron, de bajar los aforos en centros nocturnos y restaurantes en Culiacán y reducir los aforos en comercios y hoteles de Mazatlán, se antoja pequeña ante la alza imparable de infecciones de coronavirus en la entidad, hace falta un golpe en la mesa para que la ciudadanía entienda en el lío en el que estamos metidos.
Es cierto también que la economía no puede detenerse, pero no puede ser posible que a las autoridades solo se les ocurran tres opciones: usar gel antibacterial, que no entre mucha gente y vacunar personas.
¿De verdad en este año y medio de pandemia no han aprendido nada? ¿Dónde están los especialistas de salud que pueden mejorar estas estrategias de contención de contagios? Y si el Gobierno los tiene, ¿por qué no los han dejado operar adecuadamente?
Ahorita la salud de las personas ya no está para experimentos, aunque haya vacuna, seguimos sin saber qué efectos negativos tiene a la larga el coronavirus, no sabemos si en 10 años los hospitales públicos y privados estén atiborrados de personas con alguna enfermedad consecuente de haberse contagiado de este virus.
Una de las medidas que podría realmente tener un efecto en el manejo de la pandemia en Sinaloa es la aceleración del programa de vacunación y nos enteramos que el Gobierno del Estado negocia con el Gobierno federal para conseguirlas.
El miércoles, el Gobierno de Sinaloa solicitó directamente a Presidencia la posibilidad de que sean enviadas medio millón de vacunas a nuestro estado, una petición que las autoridades ven con buenos ojos.
La llegada de las 500 mil vacunas sería la próxima semana y cambiaría completamente el panorama de la pandemia en Sinaloa, ya que permitiría llegar a los 2 millones de vacunados, una cifra de inmunizados que podría cambiar la guerra contra el virus en la región.
La noticia de que Mazatlán contará con más de mil condominios o departamentos para el cierre de 2021, más que ponernos a celebrar debería de ponernos a pensar.
La primera pregunta que nos deberíamos de hacer es si nuestra ciudad debería de apostarle a un crecimiento desmesurado de construcciones, cuando ni siquiera contamos con los servicios básicos con la calidad necesaria para los habitantes que ya vivimos en el puerto.
Los edificios brotan como hongos, pero no se ve que la construcción de infraestructura se desarrolle con la misma velocidad.
Hay que recordar que muchos de esos departamentos solo serán utilizados de vez en cuando y que la ciudad debe de prestarles servicios las 24 horas, un gran negocio para los desarrolladores y un mal negocio para la ciudad.
La narrativa de Morena desde el Congreso de Sinaloa ha sido echarle en cara al Gobernador Quirino Ordaz Coppel todas las cosas que deja de hacer porque no hay dinero, incluso cuando se trata de entregar el recurso ya asignado en el presupuesto.
Pero nada más tocaron el tema de la consulta popular sobre el juicio a ex presidentes y todos estuvieron de acuerdo. Los morenistas son incapaces de criticar los gastos cuando vienen de su partido o desde el Gobierno federal.
Son 500 millones los que se van a usar para hacer esta consulta. Ya quisiera Sinaloa que esos recursos fueran para la presas Picachos y la Santa María.
Los grupos de búsqueda de personas desaparecidas en Sinaloa ni en sus mejores sueños han tenido esta cantidad, pero para Morena está todo bien.
La noticia de que no se permitirán espectadores durante los Juegos Olímpicos de Tokio le supo a poco a un multitud de japoneses inconformes que piden mayores medidas de seguridad contra el Covid-19.
Los inconformes exigen la cancelación definitiva de la justa olímpica, algo que no solo tiene preocupados a los organizadores, sino a los cientos de jugadores que participarán en la olimpiada.
Entendemos que a ningún Gobierno le interesa dar malas noticias, es algo natural, pero la tercera ola de Covid-19 no es una noticia que se pueda ocultar, finalmente nuestros gobiernos han terminado por aceptar la pesadilla en que se nos ha convertido el aumento acelerado de contagios del virus.
Las autoridades van contrarreloj en la carrera contra el coronavirus, si sabían algo se tardaron para empezar las acciones contra él porque ahora por más que las medidas quieran ser rigurosas a lo mejor ya no les alcanza el tiempo para impedir el semáforo rojo, y lo que es peor, el contagio y muerte de más personas.
Desde el “ajuste” de cifras de Covid-19, el 28 de junio se disparó el número de pacientes activos, lo único que ha hecho Sinaloa es seguir subiendo en la espiral de contagios y las autoridades lo único que hacen es seguir repartiendo gel antibacterial a diestra y siniestra, y repetir incansablemente que las cosas están bien.
Tarde, pero al fin el Gobierno estatal y los gobiernos municipales en Sinaloa reaccionaron ante la tercera ola de contagios y anunciaron los primeros cierres, con la intención de contener el rebrote.
Las medidas que propusieron, de bajar los aforos en centros nocturnos y restaurantes en Culiacán y reducir los aforos en comercios y hoteles de Mazatlán, se antoja pequeña ante la alza imparable de infecciones de coronavirus en la entidad, hace falta un golpe en la mesa para que la ciudadanía entienda en el lío en el que estamos metidos.
Es cierto también que la economía no puede detenerse, pero no puede ser posible que a las autoridades solo se les ocurran tres opciones: usar gel antibacterial, que no entre mucha gente y vacunar personas.
¿De verdad en este año y medio de pandemia no han aprendido nada? ¿Dónde están los especialistas de salud que pueden mejorar estas estrategias de contención de contagios? Y si el Gobierno los tiene, ¿por qué no los han dejado operar adecuadamente?
Ahorita la salud de las personas ya no está para experimentos, aunque haya vacuna, seguimos sin saber qué efectos negativos tiene a la larga el coronavirus, no sabemos si en 10 años los hospitales públicos y privados estén atiborrados de personas con alguna enfermedad consecuente de haberse contagiado de este virus.
Una de las medidas que podría realmente tener un efecto en el manejo de la pandemia en Sinaloa es la aceleración del programa de vacunación y nos enteramos que el Gobierno del Estado negocia con el Gobierno federal para conseguirlas.
Ayer, el Gobierno de Sinaloa solicitó directamente a Presidencia la posibilidad de que sean enviadas medio millón de vacunas a nuestro estado, una petición que las autoridades ven con buenos ojos.
La llegada de las 500 mil vacunas sería la próxima semana y cambiaría completamente el panorama de la pandemia en Sinaloa, ya que permitiría llegar a los 2 millones de vacunados, un cifra de inmunizados que podría cambiar la guerra contra el virus en la región.
El Alcalde de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, maneja su agenda a beneficio y no como un deber de funcionario municipal.
Ayer, anduvo en eventos de la Cruz Roja y de Construyendo Espacios para la Paz, además de reuniones privadas con autoridades de Protección Civil, pero no avisó a los medios de comunicación.
El pasar desapercibido no es propio de nuestro Presidente Municipal, ¿andaba sacándole la vuelta a un bache o a alguna pregunta incómoda?
Por cierto, el único evento que tenía programado era en el ejido La Campana, pero poco antes de una hora avisó que no iría.
Todo el día hubo rumores de nuevas restricciones en espacios públicos y privados debido al incremento de casos, ¿le habrá dado miedo que le preguntaran sobre eso?
La narrativa de Morena desde el Congreso de Sinaloa ha sido echarle en cara al Gobernador Quirino Ordaz Coppel todas las cosas que deja de hacer porque no hay dinero, incluso cuando se trata de entregar el recurso ya asignado en el presupuesto.
Pero nada más tocaron el tema de la consulta popular sobre el juicio a ex presidentes y todos estuvieron de acuerdo. Los morenistas son incapaces de criticar los gastos cuando vienen de su partido o desde el Gobierno federal.
Son 500 millones los que se van a usar para hacer esta consulta. Ya quisiera Sinaloa que esos recursos fueran para la presas Picachos y la Santa María.
Los grupos de búsqueda de personas desaparecidas en Sinaloa ni en sus mejores sueños han tenido esta cantidad, pero para Morena está todo bien.
Los que siguen sin llegar a un acuerdo son los vecinos y usuarios de “La Milla”, ya que rechazan el proyecto Parque Ecológico, que desarrolla la Sociedad Botánica en colaboración con Gobierno del Estado.
El proyecto Parque Ecológico que se pretende realizar dentro de “La Milla”, una pista para realizar actividad física que se encuentra a un lado del Jardín Botánico, ha causado desagrado y manifestaciones.
El grupo de vecinos ya ha salido varias veces a protestar y mostrar su postura, ya que señalan que esta obra más que beneficiar, es algo que va a dañar el medio ambiente, además de quitarles su espacio para realizar actividad física.
El 20 de mayo fue cuando se presentó este proyecto y días después empezaron las intervenciones para su inicio, pero Obras Públicas suspendió los trabajos.
Los inconformes lanzaron una petición en Change.org para juntar firmas en contra del proyecto, mientras la Sociedad Botánica hoy presentará un posicionamiento sobre el tema.
Parte de los mismos vecinos que ahora se oponen al proyecto que invadirá “La Milla”, son los que estuvieron en contra del proyecto Distrito Paseo Mundial, que finalmente no se ha llevado a cabo.
El asunto merece quizás un análisis a profundidad de las autoridades, para que socialicen el proyecto y no termine en un desarrollo más, que afecte al medio ambiente.