MALECÓN
02/05/2025 04:00
    Malecón es columna institucional de esta casa editorial. / malecon@noroeste.com
    El festejo a Jesús Malverde que siempre iniciaba de madrugada. En el que la gente llegaba, se congregaba, encendía veladoras, tocaba música, comía algo en la calle. Era un momento compartido, parte del calendario no oficial de Culiacán. Ahora no. Ahora empezará a las 8:00 de la mañana, porque la madrugada ya no es terreno seguro.
    Tradiciones que
    el miedo borra

    Hay decisiones que, aunque parezcan pequeñas, dicen mucho de lo que se vive en una ciudad. Cambiar el horario de una celebración no parecería gran cosa, pero cuando ese cambio obedece al miedo, algo más profundo se mueve.

    El festejo a Jesús Malverde que siempre iniciaba de madrugada. En el que la gente llegaba, se congregaba, encendía veladoras, tocaba música, comía algo en la calle. Era un momento compartido, parte del calendario no oficial de Culiacán. Ahora no. Ahora empezará a las 8:00 de la mañana, porque la madrugada ya no es terreno seguro.

    Y uno se pregunta, ¿cuántas cosas han dejado de hacerse como antes sin que nos demos cuenta? ¿Cuántos rituales cotidianos hemos ido adaptando en silencio para no exponernos, para no arriesgar?

    No se trata sólo de una fiesta ni de quién es Malverde. Se trata de cómo una comunidad va perdiendo lugares, horarios, costumbres. Cómo lo que era parte del paisaje se va achicando por miedo. Y si eso sigue pasando, ¿qué queda de lo que alguna vez nos unió?

    Cuando una ciudad ya no puede habitar sus propias tradiciones con libertad, no sólo se altera una celebración sino que se va desgastando poco a poco la idea misma de comunidad. Y aunque no siempre lo notamos, eso también duele.

    Otra de la historias de Culiacán

    En un kínder de Culiacán se tuvo que activar el protocolo de seguridad contra balaceras debido a detonaciones de armas de fuego en el sector donde se ubica, la colonia Lombardo Toledano.

    El episodio, lamentablemente, se suma a otras situaciones de inseguridad registradas cerca de centros educativos durante la crisis de seguridad de estado.

    El protocolo de seguridad ante estos hechos es en pocas palabras esconderse y reportar, pues no hay mucho que puedan hacer los docentes ante estos incidentes.

    La cosa se volvió preocupante cuando los docentes quisieron denunciar al 911 pero la llamada no entró. Los policías que atendieron el hecho llegaron porque se enteraron de la situación y le hicieron frente, pero no hay un reporte formal por los hechos. De acuerdo con los propios policías que atendieron el reporte, las líneas de emergencias estaban saturadas.

    En septiembre, el Gobierno de Sinaloa implementó un plan de seguridad para escuelas con el despliegue de elementos de los tres niveles de gobierno, pero ahora este plan ya no se ve.

    Imposible que la realidad siga siendo negada por nuestras autoridades.

    Por este caso ojalá y el Alcalde Juan de Dios Gámez Mendívil salga a declarar y establecer las condiciones que propiciaron que los pequeños tuvieran que interrumpir su fiesta del día de la niñez por balas.

    Yéndose a extrainnings
    de a gratis

    Pues al cierre de esta edición no ha concluido la reunión entre la 65 Legislatura del Congreso con la Fiscalía General del Estado, por el juicio de desafuero contra Gerardo Vargas Landeros y Genaro García Castro.

    Dentro del Palacio Legislativo ya se ha especulado respecto al destino de ambos morenistas, tanto el Alcalde con licencia de Ahome, como del Diputado local, pero aún sin el anuncio oficial.

    Entre lo que ha sonado en radio pasillo del Congreso, y los antecedentes que tenemos en Sinaloa con el desafuero del ex Alcalde de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, pues quien sabe si cuando lea esto aún tengan fuero Vargas Landeros y García Castro.

    Eso sí, la sesión incluso antes de terminar dejó detalles importantes, como el desaire al citatorio de la parte acusada, pues aunque un par de horas Vargas Landeros pidió licencia como Alcalde y hasta se pronunció por el caso en un video en redes sociales, en el Parlamento nomás se quedaron esperándolo.

    Y a diferencia de cuando desaforaron al ángel caído del Ayuntamiento de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, ahorita no hay alguna emergencia sanitaria que le urja a salir del País para vacunarse. Chance y no quiere que lo vacunen, pero de su chamba.

    El caso de García Castro resultó más llamativo aún, porque el Diputado ni licencia pidió.

    Al parecer sí se encontraba tan tranquilo como presumió en declaraciones días antes de la reunión, porque ni la molestia se tomó de confirmar su asistencia, o al menos decir “lo checamos el lunes”. Ni eso.

    Y ya que las licencias para separarse del cargo estaban de moda, al Diputado Juan Carlos Patrón Rosales como que no le convenció la idea de participar en la reunión, y le dejó el changarro a su esposa para que asumiera como Diputada suplente, la señora Elizabeth Ramírez Tirado.

    A más de cinco horas de su duración, da la sensación que las y los diputados están alargando un juego que todos los involucrados saben cómo terminará, pero que deben seguir el acto protocolario de jugarlo.

    Es difícil creer que dentro del Legislativo se armará una rebelión cuatroteísta que rescate a Vargas Landeros de seguir el mismo sendero que llevó a Estrada Ferreiro y a “El Químico” Benítez a su desafuero, y posteriormente a ser candidatos fallidos del PT. Y no sabemos cuál fue lo peor para ellos.

    Tradiciones que
    el miedo borra

    Hay decisiones que, aunque parezcan pequeñas, dicen mucho de lo que se vive en una ciudad. Cambiar el horario de una celebración no parecería gran cosa, pero cuando ese cambio obedece al miedo, algo más profundo se mueve.

    El festejo a Jesús Malverde que siempre iniciaba de madrugada. En el que la gente llegaba, se congregaba, encendía veladoras, tocaba música, comía algo en la calle. Era un momento compartido, parte del calendario no oficial de Culiacán. Ahora no. Ahora empezará a las 8:00 de la mañana, porque la madrugada ya no es terreno seguro.

    Y uno se pregunta, ¿cuántas cosas han dejado de hacerse como antes sin que nos demos cuenta? ¿Cuántos rituales cotidianos hemos ido adaptando en silencio para no exponernos, para no arriesgar?

    No se trata sólo de una fiesta ni de quién es Malverde. Se trata de cómo una comunidad va perdiendo lugares, horarios, costumbres. Cómo lo que era parte del paisaje se va achicando por miedo. Y si eso sigue pasando, ¿qué queda de lo que alguna vez nos unió?

    Cuando una ciudad ya no puede habitar sus propias tradiciones con libertad, no sólo se altera una celebración sino que se va desgastando poco a poco la idea misma de comunidad. Y aunque no siempre lo notamos, eso también duele.

    Otra de la historias de Culiacán

    En un kínder de Culiacán se tuvo que activar el protocolo de seguridad contra balaceras debido a detonaciones de armas de fuego en el sector donde se ubica, la colonia Lombardo Toledano.

    El episodio, lamentablemente, se suma a otras situaciones de inseguridad registradas cerca de centros educativos durante la crisis de seguridad de estado.

    El protocolo de seguridad ante estos hechos es en pocas palabras esconderse y reportar, pues no hay mucho que puedan hacer los docentes ante estos incidentes.

    La cosa se volvió preocupante cuando los docentes quisieron denunciar al 911 pero la llamada no entró. Los policías que atendieron el hecho llegaron porque se enteraron de la situación y le hicieron frente, pero no hay un reporte formal por los hechos. De acuerdo con los propios policías que atendieron el reporte, las líneas de emergencias estaban saturadas.

    En septiembre, el Gobierno de Sinaloa implementó un plan de seguridad para escuelas con el despliegue de elementos de los tres niveles de gobierno, pero ahora este plan ya no se ve.

    Imposible que la realidad siga siendo negada por nuestras autoridades.

    Por este caso ojalá y el Alcalde Juan de Dios Gámez Mendívil salga a declarar y establecer las condiciones que propiciaron que los pequeños tuvieran que interrumpir su fiesta del día de la niñez por balas.

    Yéndose a extrainnings
    de a gratis

    Pues al cierre de esta edición no ha concluido la reunión entre la 65 Legislatura del Congreso con la Fiscalía General del Estado, por el juicio de desafuero contra Gerardo Vargas Landeros y Genaro García Castro.

    Dentro del Palacio Legislativo ya se ha especulado respecto al destino de ambos morenistas, tanto el Alcalde con licencia de Ahome, como del Diputado local, pero aún sin el anuncio oficial.

    Entre lo que ha sonado en radio pasillo del Congreso, y los antecedentes que tenemos en Sinaloa con el desafuero del ex Alcalde de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, pues quien sabe si cuando lea esto aún tengan fuero Vargas Landeros y García Castro.

    Eso sí, la sesión incluso antes de terminar dejó detalles importantes, como el desaire al citatorio de la parte acusada, pues aunque un par de horas Vargas Landeros pidió licencia como Alcalde y hasta se pronunció por el caso en un video en redes sociales, en el Parlamento nomás se quedaron esperándolo.

    Y a diferencia de cuando desaforaron al ángel caído del Ayuntamiento de Culiacán, Jesús Estrada Ferreiro, ahorita no hay alguna emergencia sanitaria que le urja a salir del País para vacunarse. Chance y no quiere que lo vacunen, pero de su chamba.

    El caso de García Castro resultó más llamativo aún, porque el Diputado ni licencia pidió.

    Al parecer sí se encontraba tan tranquilo como presumió en declaraciones días antes de la reunión, porque ni la molestia se tomó de confirmar su asistencia, o al menos decir “lo checamos el lunes”. Ni eso.

    Y ya que las licencias para separarse del cargo estaban de moda, al Diputado Juan Carlos Patrón Rosales como que no le convenció la idea de participar en la reunión, y le dejó el changarro a su esposa para que asumiera como Diputada suplente, la señora Elizabeth Ramírez Tirado.

    A más de cinco horas de su duración, da la sensación que las y los diputados están alargando un juego que todos los involucrados saben cómo terminará, pero que deben seguir el acto protocolario de jugarlo.

    Es difícil creer que dentro del Legislativo se armará una rebelión cuatroteísta que rescate a Vargas Landeros de seguir el mismo sendero que llevó a Estrada Ferreiro y a “El Químico” Benítez a su desafuero, y posteriormente a ser candidatos fallidos del PT. Y no sabemos cuál fue lo peor para ellos.